A la par que las autoridades de investigación de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) han emprendido una estrategia para desmantelar a los distintos cárteles locales que se disputan la venta de droga al menudeo, la extorsión y el secuestro, siendo uno de los más afectados La Unión Tepito, grupos menores o que llaman menos la atención —pero igual de peligrosos—, se mantienen vigentes pese a las detenciones de sus principales líderes visibles.
Así, uno de estos grupos, al que no se ha mermado su actividad delincuencial, con base en un seguimiento judicial y comparativo de las detenciones entre La Unión y otros grupos, es Los Rodolfos, banda criminal que opera en las inmediaciones de la alcaldía Xochimilco y desde ese punto de la ciudad ha hecho frente al remanente que queda del Cártel de Tláhuac, y el único que sigue intentando penetrar en la zona de influencia de las células de La Unión Tepito.
El pasado 9 de noviembre, Héctor Rodolfo, La Gorda, líder de ese grupo criminal, fue liberado y exonerado de las imputaciones de las autoridades policiacas.
Sólo estuvo 13 meses en prisión pese a ser señalado como uno de los objetivos prioritarios y ser identificado como uno de los generadores de violencia en la metrópoli. La fiscalía capitalina no le pudo acreditar un delito de alto impacto.
La Gorda pagó una multa de 70 mil 850 pesos que le impuso el juez, ya que sólo fue procesado por el delito de narcomenudeo y 300 días más por cohecho.
Unas semanas después de regresar a las calles, el líder fundador de Los Rodolfos fue asesinado en inmediaciones de la alcaldía Coyoacán.
Las primeras investigaciones revelan que fueron sus propios “amigos” quienes lo acribillaron para quedarse con la administración del grupo criminal.
Junto con La Gorda fueron liberados Othón Aguirre Ferrer, Erick Israel Estrada Lima, Enrique Reyes Ramírez, sus gatilleros y hombres de confianza, quienes ahora, según el trabajo de inteligencia de la policía capitalina, buscan formar otra célula criminal.
En contraparte, los integrantes de La Unión Tepito, La Fuerza Anti-Unión, el propio Cártel de Tláhuac y otras agrupaciones más pequeñas son golpeadas por la policía capitalina casi hasta su extinción; Roberto Moyado Esparza, El Betito; David García Ramírez, El Pistache, Óscar Flores, El Lunares, todos líderes, están detenidos y con una larga condena.
El seguimiento judicial que se ha hecho sobre los integrantes de Los Rodolfos revela que La Gorda no es el único líder de este grupo delincuencial que obtiene su libertad.
Gerardo Mora Corona El Yayo, actual líder de la agrupación criminal y quien supuestamente ordenó la ejecución de su expatrón, sólo pasó seis meses en el Reclusorio Sur, a pesar de ser señalado como el jefe de sicarios de La Gorda y presuntamente está relacionado con al menos 12 homicidios dolosos, extorsión, secuestro y venta de drogas.
Según las autoridades de investigación, El Yayo fue el responsable de ordenar el multihomicidio de siete jóvenes en la plazuela de los Reyes Culhuacán en febrero de 2019.
El sospechoso sigue en las calles y busca expandirse hasta la zona Centro con ayuda, aparentemente, de integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
El Yayo, detenido en junio de 2020, obtuvo su libertad seis meses después, eso tras pagar una multa de 4 mil 863 pesos.
El imputado sólo fue acusado por el Ministerio Público de portación de arma y delitos contra la salud, por lo que se le dictó una pena de cuatro años y 10 meses de prisión, entonces obtuvo beneficios y le impusieron una multa de 4 mil 863 pesos.
Lo mismo sucedió con David Castillo, El Gnomo, líder de una fracción de Los Rodolfos, quien fue detenido junto a 13 personas durante un cateo realizado en un domicilio de la colonia Santa Cruz Xochitepec, en Xochimilco, en febrero de 2020, y obtuvo su libertad ocho meses después; fue procesado por narcomenudeo.
Algunos cabecillas de este grupo no han sido detenidos, como César Rodríguez Morales, hermano de La Gorda, y Carlos Morales Aparicio, El Negro.