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El cuerpo de Gilda Guadalupe Pérez Rivera, de 26 años, hallada el 8 de marzo en un cesto abandonado en la Unidad Habitacional de Tlatelolco, fue entregado a sus familiares, luego de que la fiscalía concluyera con la identificación.
La madre de la víctima, Lourdes Rivera, no quiso dar declaraciones y acudió la mañana del jueves a realizar los trámites de entrega en el Instituto de Ciencias Forenses.
Se sabe que la necropsia arrojó como causa de muerte de la joven un congestión visceral generalizada.
La Fiscalía General de Justicia informó horas más tarde que como resultado de las diligencias realizadas tras el hallazgo de un cuerpo sin vida en la zona habitacional Nonoalco-Tlatelolco, este fue identificado por sus familiares el 12 de marzo.
Gilda Guadalupe fue reportada como desaparecida el 5 de marzo, por lo que la fiscalía emitió un fotovolante con las señas particulares de la persona para iniciar los protocolos de búsqueda con un grupo interdisciplinario.
Desde el hallazgo del cuerpo de Gilda Guadalupe, agentes de la Policía de Investigación (PDI) analizan las imágenes de por lo menos ocho cámaras de seguridad, seis de ellas del C5, sin que hasta el momento se haya registrado a personas involucradas en el caso.
Así se lee en un informe anexado a la carpeta de investigación CI-FICUH/UAT-CUH-1/UI-1 S/D/00264/03-2025, en donde se revisaron seis cámaras del C5, sin que se tuvieran imágenes relacionadas con el crimen los días 5 y 6 de marzo.
