Nezahualcóyotl, Méx.— Nunca ha oído en su vida, pero aprendió a tocar el violín y uno de sus sueños es ser concertista.
Sofía nació con sordera neurosensorial hace 12 años y ese impedimento físico no ha sido obstáculo para desarrollar su destreza musical.
“El año pasado logré encontrar a una maestra que quiso enseñarle a tocar el violín, Sofía tenía ganas de aprender desde que tenía tres años”, contó Elizabeth García Flores, madre de la pequeña.
Dos meses después de que empezaron sus clases, Sofía ofreció un concierto con la orquesta de la Fundación Azteca. En julio de 2019 presentaron su segundo concierto y en diciembre el tercero.
Era la única niña que no podía escuchar lo que tocaba, pero pudo expresar todas sus sensaciones al límite.
La menor de 12 años, originaria del municipio de Nezahualcóyotl, ha librado diversas batallas junto a su madre y sus dos hermanitas para tener un desarrollo educativo y personal pleno.
La familia busca concretar el principal anhelo de Sofía: que escuche por primera vez. Para que eso ocurra es necesario que se someta a una operación de dos implantes cocleares, pero necesitan reunir casi un millón de pesos antes de agosto.
“Los implantes cocleares tienen un costo cada uno de 425 mil pesos, con eso Sofi podría escuchar; se abre la parte de atrás del hueso del cráneo y se instala el dispositivo, a los 30 días se activa y así arranca todo el proceso de terapias”, explicó la madre de la niña.
Los especialistas le fijaron el mes de agosto como plazo máximo para que se someta a la intervención quirúrgica, porque su cuerpo está en crecimiento y después sería más complicado que la operación tuviera éxito.
“El crecimiento normal de Sofía podría complicar que reciba estos implantes, por lo que el apoyo de la gente es indispensable para alcanzar su sueño de ser violinista profesional y estudiar robótica, que es otro de los deseos que tiene desde hace varios años”, contó Elizabeth.
Durante casi un año, Sofía fue sometida a diversos estudios en el Hospital Federico Gómez en la Ciudad de México, donde determinaron que era candidata al tratamiento, incluso contaban con patrocinadores para sufragar el costo de ambos aparatos, pero la contingencia sanitaria por Covid- 19 ocasionó que el apoyo prometido no se concretara.
La madre de la niña es profesora de nivel preescolar en una escuela pública de Nezahualcóyotl, pero aunque está afiliada al Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios, le dijeron que no pueden practicarle la operación a la menor en alguno de sus hospitales.
Sofía aprendió a comunicarse con la gente a través del lenguaje de las señas y durante nueve meses una maestra le enseñaba a leer los labios, pero por la pandemia sus clases se suspendieron.
La menor ha cursado su educación en escuelas públicas, lo hizo en el nivel preescolar y en la primaria, donde hace unas semanas concluyó esa etapa académica.
La familia de Sofía puso a disposición el número de cuenta Bancomer 41523131-96561604 a nombre de Elizabeth García Flores. También se puede ayudar en https://donadora.org/campanas/ayuda-sofia.
“Sé que es una situación difícil y que muchos van al día, pero apelo a su buen corazón porque sé que algún día no voy a estar con ella, por eso quiero que sea autosuficiente y cumpla sus sueños”, dijo.
