Nezahualcóyotl, Méx.
Frente al palacio municipal fue colocada una cruz en memoria de “Lupita”, “La niña de las calcetitas rojas ” que este día cumplió un año que su cuerpo fue encontrado sin vida en el Bordo de Xochiaca, en la colonia El Sol, en Nezahualcóyotl .
Sobre el camellón de la avenida Chimalhuacán, familiares, amigos, vecinos y parientes de otras mujeres que han sido asesinadas en el Estado de México en los últimos meses, realizaron un acto simbólico en honor de la pequeña de cuatro años que fue asesinada a golpes por su padrastro y su madre en la casa donde vivían en la colonia Agua Azul, en Nezahualcóyotl .
“No la olviden, esta cruz es para eso para que no se olvide y para que cada persona, aquellas que sabían que la niña era violentada , recuerden que pudieron haber hecho mucho por evitar lo que sucedió”, dijo la activista Frida Guerrero.
Rosa Ayala, una vecina quien le daba de comer a la niña porque en su casa no era alimentada por sus padres, recordó cómo la niña llegó a su casa hambrienta, sucia y descuidada y le contó que tenía que recoger residuos de alimentos en la basura porque no la atendían en su hogar.
Rosa intentó hacerse cargo de “Lupita”, que era el nombre con el que la identificaban porque nunca fue llevada al Registro Civil por sus padres, pero estos se negaron “sólo para matarla”, sollozó.
Durante el acto simbólico Íker Balderas cantó una canción a la “Niña de las calcetitas rojas”, que compuso en su honor.
“Lupita” presentaba el síndrome del maltrato infantil, además de que era abusada sexualmente por su padrastro.
Tanto él como la madre de la menor se encuentran recluidos en el penal Neza Bordo desde el 24 de diciembre, donde enfrentan el delito de feminicidio.
lsm