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El comercio informal, en su mayoría, cedió este 24 a instalarse como es habitual, y buscar reacomodarse en la explanada del Palacio de Bellas Artes.
En un recorrido realizado se constató que fueron pocos los informales que este día se colocaron.
Ahora no fue habitual el ruido visual y obstrucción que generan los paraguas de colores.
Tampoco hubo anafres con carbón encendido ni gente aglomerada para poder caminar. Sin embargo, los pocos comerciantes que sí se instalaron respetaron el área delimitada por la policía capitalina.
Se pudo observar que los elementos han ido ganando terreno para impedir que se instalen más puestos.
Enfundados con su escudo y equipo, los uniformados veían tranquilos, algunos platicaban, mientras otro realizaban recorridos.
Y es que este día algunas personas decidieron salir al primer cuadro de la capital para concluir con compras navideñas.
Las calles como Madero, 16 de Septiembre, Izazaga, y 20 de Noviembre, lucían con gente pero no la habitual, por lo que no había mareas de personas transitando.
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