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Naucalpan, Méx.— “Un fiscalazo” fue lo que ocurrió la tarde-noche del viernes con el Operativo Atarraya, señalaron alrededor de 50 trabajadores de barberías establecidas en Naucalpan y Tlalnepantla que se reunieron la mañana del sábado en el parque Revolución de la colonia Centro.
Los barberos manifestaron al unísono que el despliegue tuvo irregularidades. Indicaron que el operativo derivó del homicidio de dos personas, ocurrido a mediados de enero en una barbería en la colonia Ampliación Ciudad de los Niños.
Una de las manifestantes, Mirna Barrero, refirió que en su local ponía pestañas y uñas, principalmente, además de ofrecer el servicio de barbería, el cual fue cerrado tras el operativo en la colonia Mártires de Río Blanco, a pesar de que no encontraron nada.
Barberos del municipio de San Mateo Atenco también se manifestaron pacíficamente para pedir que la fiscalía realice operativos apegados a la ley, ya que en algunos casos colocaron sellos de suspensión sin que se encontrara algún delito.
Comentaron que no están en contra de los operativos de seguridad ya que en algunas ocasiones ellos han sido víctimas de la delincuencia, pero sí de los procedimientos “autoritarios”.
En San Mateo Atenco, de acuerdo con autoridades de seguridad, se cerraron tres inmuebles de los cuales sólo uno podría estar involucrado con la venta de sustancias ilícitas.
Los inconformes pidieron el apoyo de la policía municipal para que durante el Operativo Atarraya estén presentes y así tener un respaldo en caso de que exista alguna irregularidad.
“Realmente no estamos en contra de los operativos sino que sean legales; no es necesario plantarnos algo para cerrar (...)”, señaló un joven barbero.
