Comerciantes reubicados en el predio de Caleta, luego del incendio provocado el jueves pasado en la Central de Abasto (Ceda), pidieron no estar en medio de supuestas disputas entre familiares, pues consideraron que “por uno pagamos todos”.
Algunos con lágrimas, comenzaron a apilar sus huacales en el espacio que les designaron en este predio, a tan sólo unos metros de donde un sujeto ocasionó un incendio.
En entrevista con EL UNIVERSAL, el señor José Esteban, uno de los afectados, dijo que si se van a pelear entre familias, que lo hagan por otro lado y busquen otras formas.
“Si hay un tema de disputas como dicen, que busquen hacerlo por otro lado, buscar hacerlo como familia por otro lado, que no afecten a las demás personas”, dijo.
Este diario realizó un recorrido por la zona siniestrada y el nuevo lugar donde el martes fueron reubicados los poco más de 359 locatarios.
Guillermo Gómez Ramos comentó que está todo en manos de las autoridades capitalinas, por lo que ellos lo único que desean es seguir trabajando.
Durante la entrevista, descansaba encima de varios huacales mientras observaba cómo todos sus compañeros afectados continuaban con la labor que hacían todos los días, hasta el jueves 6 de abril, cuando se registró la conflgración en el Mercado de Envases Vacíos de la Central de Abasto.
Cámaras de seguridad en el lugar captaron a un sujeto, identificado como Marco Antonio Ocotitla, quien por una disputa familiar ocasionó el siniestro.
Inseguridad
Sin embargo, el tema de las disputas familiares no es el único problema de inseguridad por el que temen los comerciantes, sino otros como la venta de droga y robos, según contó uno de los cargadores de la Ceda.
El trabajador, quien pidió no ser citado por miedo a que lo identifiquen, dijo que a pesar de los trabajos de las autoridades, continúa el problema de la inseguridad en el lugar.
“Hay muchos puntos donde venden droga, muchos asaltos”, relató el hombre.
Recordó la balacera por una bodega en el pasillo K85, en donde tres personas perdieron la vida. “La gente viene con miedo. (...) cada día está más feo, a veces salimos de casa sin saber si vamos a regresar”, expresó.
En cuanto a las zonas en donde presuntamente se vende droga, el comerciante aseguró que hay bodegas que se prestan para ese tipo de actividades.
Uno de los puntos, refirió, es donde sacaban carretillas, misma zona donde ocurrió una balacera.