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La administración de la próxima jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, pondrá a consideración la modificación de la marca CDMX, creada en el gobierno de Miguel Ángel Mancera.
En entrevista con EL UNIVERSAL, Carlos Mackinlay Grohmann, quien será el nuevo secretario de Turismo capitalino, dio a conocer que se realizará un seminario para analizar la marca y sus alcances, pues las dos primeras letras no se relacionan con el término “ciudad” a nivel de un angloparlante o francoparlante.
¿Va a continuar la marca CDMX?
—La marca ha tenido un posicionamiento interesante. No nos hemos reunido para discutir al respecto, algunos piensan que es una marca excelente y que tiene un buen impacto nacional; otros, que a nivel internacional no significa mucho, las letras “CD” no significan “ciudad” en inglés ni francés. Entonces haremos una suerte de seminario para darle a Claudia una propuesta al respecto.
¿Sería cambiar las letras o los colores rosa y negro?
—Todo se vale en una marca. Yo recuerdo que el Consejo de Promoción Turística tenía una imagen colorida y letras en referencia al ámbito prehispánico, se mantuvo la marca durante muchos años. Luego se le hicieron cambios en colores y diseño; yo creo que sería la mejor alternativa.
¿Continuarán los eventos masivos de Fórmula 1, NFL, NBA y conciertos de artistas internacionales?
—Eso no es una decisión del Gobierno de la Ciudad de México, son convenios entre empresas, apoyados por el Consejo de Promoción Turística de México, o son patrocinios de empresas privadas. Estoy convencido de que han permitido una mejoría de la imagen de la Ciudad a nivel internacional. Si se puede apoyar, los apoyaremos. Sin embargo, es una derrama económica que se ubica en un fin de semana o en tres días. Nosotros plantemos una serie de festivales fijos, como lo ha propuesto nuestro amigo José Alfonso Suárez del Real, que encabezará la Secretaría de Cultura.
Mackinlay Grohmann, quien repetirá por segunda ocasión como titular de la Secretaría de Turismo capitalina, luego de estar al frente de la dependencia en la administración de Marcelo Ebrard, explicó que el objetivo del próximo gobierno es crear más de 160 mil empleos directos e indirectos relacionados al turismo.
Abundó que se fomentará el segmento de experiencias, sobre todo en el oriente de la Ciudad de México; por ejemplo, la realización de recorridos en la Central de Abasto en Iztapalapa. Asimismo buscarán crear más rutas de Turibús y Capital Bus en la zona sur, específicamente en las delegaciones Milpa Alta, Xochimilco y Tláhuac, para conformar recorridos campestres. También se enfocará en el rescate del Canal Nacional a fin de conformar una zona turística atractiva.
“Habrá una política turística vinculada 100% a los objetivos del gobierno, que es la innovación. La prioridad es el turismo cultural y de reuniones que tiene que ver con congresos, convenciones, ferias y exposiciones. También vamos a dar impulso al segmento LGBTTTI, porque genera no solo una importante derrama económica, sino significa orgullo de demostrar que es una ciudad de derechos, que es una ciudad gay friendly”.
¿Tomarán alguna medida contra la inseguridad?
—El tema de seguridad es importante para que un turista pueda decidir acerca de una visita a un destino específico, por lo tanto son temas prioritarios. Sabemos que el turista ha dejado de tener preocupación por la inseguridad cuando visita la Ciudad de México y eso es motivo de regocijo. Tenemos que afinar los mecanismos de control, seguimiento, atención a los turistas con los hoteleros y restauranteros, todo lo vamos a trabajar de manera fuerte. Tenemos que difundir que somos una ciudad segura para que no haya percepción negativa.
¿Funciona la policía turística?
—La policía turística fue un intento cuando estaba el licenciado Andrés Manuel López Obrador. En ese momento, cuando estaban remodelando los paseos turísticos, la seguridad fue importante. Yo creo que no es necesaria una policía turística. Sí fue atractiva la policía montada, fue interesante. Yo le voy a plantear a la doctora Claudia, a ver si a ella le interesa, porque decían que era la policía de los charros o policía charra. Tuvo un gran éxito entre los niños, jóvenes, paseantes y en la Alameda era ya de encuentro turístico.
