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Tultepec, Méx.— El tianguis pirotécnico de San Pablito es un gran elefante blanco de más de 42 millones de pesos. El mercado fue reconstruido por tercera vez en su historia, pero la venta de cohetes en su interior sigue suspendida a dos años del incendio que lo consumió totalmente y que dejó un saldo de 42 personas muertas y 62 más lesionadas.
El alcalde de Tultepec, Armando Cervantes Punzo, aseguró que no hay razón para que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) continúe la suspensión de los permisos a los artesanos, por lo que los locatarios analizan alternativas legales para inconformarse.
Las explosiones del 20 de diciembre de 2016 cimbraron Tultepec, en lo que es la mayor tragedia por pirotecnia en este municipio. Y a pesar del luto, continúa la fabricación de fuegos de artificio y también los accidentes con pólvora.
Antecedentes de San Pablito
El 13 de octubre de 1998 una explosión en el barrio San Rafael, en el centro del ayuntamiento, provocó la muerte a 10 personas y afectó 30 viviendas, algunas de las cuales quedaron totalmente destruidas por la onda expansiva. El accidente obligó la salida de los talleres de fabricantes y vendedores de las zonas urbanas.
Poco después fue creado el primer tianguis pirotécnico del municipio.
Tras deambular por diversos predios, finalmente se construyó el tianguis de San Pablito en el predio que actualmente ocupa.
Tras un periodo sin percances, el 15 de septiembre de 2005 un incendio, que duró sólo 15 minutos, consumió totalmente el tianguis pirotécnico.
Un año después, el 11 de septiembre de 2006, el fuego consumió nuevamente los locales. En ningún caso hubo personas fallecidas y la reconstrucción del mercado fue inmediata, supuestamente aplicando severas medidas de seguridad, detallaron autoridades en esa ocasión.
El 20 de diciembre de 2016 de nueva cuenta el mercado se incendió.
El gobierno municipal inició, a principios de 2017, una campaña con la que pretendía mostrar que el municipio de Tultepec no es sólo tragedia, sino alegría, arte y espectáculo, cuyo objetivo era reactivar la pirotecnia luego del incendio del tianguis de San Pablito.
Pero el 4 de marzo de 2017 los habitantes del municipio fueron despertados con la explosión en una vivienda del barrio La Cantera en donde almacenaban material pirotécnico; el accidente provocó la muerte inmediata a cuatro personas, dos de ellas menores de edad.
Ese mismo día el entonces alcalde Armando Portuguez Fuentes, quien solicitó licencia definitiva para dejar el cargo, inauguró la Feria Nacional de la Pirotecnia.
Ese año el gobierno municipal intentó sacar del centro municipal la tradicional Pamplonada Pirotécnica, que se celebra cada 8 de marzo, en honor a San Juan de Dios, patrono de los pirotécnicos. Pero no pudo y una parte de los “toritos” fueron quemados en el jardín principal. Un año después la propuesta de sacar “la quema” del primer cuadro fue arrumbada.
Gloria María Almader Galindo, integrante de una familia de cuatro generaciones de pirotécnicos, aseguró, el 8 de marzo de 2017, durante el recorrido de los “toritos”: “Estamos de luto, sí, pero creo que primero son nuestras tradiciones”.
Afirmó: “Esto no se acaba. La mayoría del pueblo se dedica a la pirotecnia. Independientemente del accidente que hubo en el tianguis de San Pablito, ha habido más [explosiones], en los talleres, y seguimos. No se acaba. Yo creo que todos nos morimos en la raya”.
Y sí, los accidentes con pólvora no cesaron y las víctimas tampoco, personas lesionadas o fallecidas, también viviendas y talleres totalmente destruidos.
Ese día murieron 24 personas, entre ellas varios policías, bomberos y curiosos que acudieron a ayudar a los heridos.
El primer estallido causó la muerte a dos artesanos. Bomberos y policías llegaron para auxiliar y estaban en el rescate de los cuerpos cuando fueron sorprendidos por las otras explosiones. Otra vez la tragedia sacudió a Tultepec.
La reconstrucción
El entonces gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas, ofreció la reconstrucción del tianguis pirotécnico de San Pablito.
En diciembre de 2016, días después del incendio, se comprometió a que expertos opinarían sobre su diseño, que contaría con las más altas medidas de seguridad.
Posteriormente, durante su campaña de proselitismo electoral, el entonces candidato del PRI a la gubernatura, Alfredo del Mazo Maza, ofreció igualmente la reconstrucción del mercado pirotécnico.
El comienzo de los trabajos de reconstrucción se retrasó. En mayo de 2017 inició el movimiento de tierra y el acondicionamiento del predio. Algunos artesanos apuntaron que dicha medida era electoral, pues en junio habría comicios para elegir gobernador de la entidad.
En julio de 2017 el gobierno estatal, a través del Instituto Mexiquense de la Pirotecnia (Imepi), realizó pruebas de resistencia a prototipos de locales, en los que se empleó un concreto especial de alta resistencia.
En diciembre del mismo año ya estaban construidos los 300 locales del tianguis de San Pablito. El gobierno del Estado de México edificó 150 locales, con costo de 35 millones de pesos. El entonces alcalde Armando Portuguez Fuentes dijo que el gobierno municipal construyó los otros 150 locales, con inversión de 7 millones de pesos.
A paso lento, avanzó la reconstrucción del tianguis pirotécnico. Recientemente fue edificada la barda perimetral.
El mercado quedó listo este año y los locatarios esperaban inaugurarlo para la venta de las Fiestas Patrias. Lo que no ocurrió.
El proyecto del mercado y sus estrictas medidas de seguridad sólo lo conocen algunas autoridades y hasta el momento no se ha hecho público. Tampoco se conocen las causas del incendio del 20 de diciembre de 2016.
Cumplimos con los requisitos: artesanos
Germán Galicia Cortés, dirigente del mercado pirotécnico, afirmó que cumplieron los requisitos exigidos por la Sedena, pero no ha sido levantada la suspensión de los permisos.
Agregó que el gobierno del Estado de México otorgó opinión favorable para 257 locales, trámite con el que pidieron a Sedena la reapertura del mercado pirotécnico.
A principios de diciembre, locatarios del tianguis de San Pablito entraron al mercado, abrieron algunos locales y ofrecen la venta de cohetes por catálogo. La mercancía es entregada en la zona de polvorines de La Saucera.
“La gran urgencia de abrir [el tianguis] es evitar que haya más clandestinaje en Tultepec”, aseguró el actual alcalde Armando Cervantes Punzo, quien sustituyó a Portuguez Fuentes, quien solicitó licencia y que el próximo 1 de enero reasumirá el cargo, pues fue reelecto como presidente municipal.
Cervantes Punzo reiteró: “Responsabilizamos a Sedena de que haya más riesgo en Tultepec por clandestinaje, al no reabrir San Pablito”.
El munícipe aclaró que “los permisos están suspendidos, no cancelados. No se ha dado la liberación de los permisos. Nos han estado realizando, irregularmente, varias visitas de verificación, la Sedena. Ya hicimos todos los trámites necesarios”.
Expresó: “Estamos evaluando de qué manera podemos abrir el mercado, estamos viendo todas las vías legales para hacerlo, específicamente irnos a algún tribunal administrativo o al amparo, alguna situación en la que podamos obligar a la autoridad federal a darnos una respuesta”.
Cervantes Punzo insistió que los locatarios cumplieron con todos los trámites exigidos, sin que la Sedena otorgue respuesta —positiva o negativa— a la petición de levantar la suspensión de los permisos. Advirtió que los comerciantes también analizan realizar movilizaciones.
“Siempre que acudimos a Sedena, porque he acudido junto con la Mesa Directiva del mercado, nos vuelven a decir ‘todavía no hay respuesta, San Pablito sigue suspendido’”, destacó.
Cervantes Punzo dijo que la Sedena argumenta que el espacio entre los locales es insuficiente, al igual que algunas medidas de seguridad, a pesar de que la institución efectuó diversas medidas se supervisión a los locales durante la construcción.
“Tenemos todas las anuencias, municipales, de Protección Civil estatal, de la Secretaría General de Gobierno del Estado, que representa al gobernador. La Ley General de Armas de Fuego y Explosivos no ha cambiado, en ese sentido Sedena no tiene cómo negarnos el permiso. Y por eso hace unas semanas, nosotros festinábamos que íbamos a abrir San Pablito, porque tenemos todos los requisitos cubiertos”, insistió.
Concluyó: “Esta situación lo único que genera son más riesgos para Tultepec, porque si tenemos los permisos suspendidos se genera más clandestinaje, queramos o no”.
EL UNIVERSAL solicitó la opinión al respecto a la Sedena, pero no hubo respuesta.
