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Pese a que las medidas para evitar la propagación de Covid-19 se han aumentado y se promueve a la población que eviten salir de casa, en la Central de Abasto de la Ciudad de México , las ventas continúan, aunque han disminuido hasta un 60%, las aglomeraciones siguen en la zona de menudeo.
En un recorrido realizado por EL UNIVERSAL se observó que las medidas de sana distancia no son llevadas a cabo, ni los comerciantes llevan a cabo acciones para evitar contagios, pues tanto el gel antibacterial y los cubrebocas no se ocupan.
“Estamos trabajando como podemos, vivimos al día, así que no podemos tomar tantas medidas, gracias a Dios todos estamos bien y pues tenemos que salir a vender, ese es nuestro trabajo diario y si no lo hacemos, quién nos ayuda”, dijo Graciela, comerciante.
La emergencia ha provocado afectaciones a comerciantes de la Central de Abasto, pese a que las ventas siguen, la distribución a restaurantes disminuyeron totalmente, aseguran.
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Maricela, quien vende limones y aguacates, comentó que pese a que las amas de casa continúan acudiendo a comprar, su venta se vio afectada con el cierre de algunos restaurantes, lo que ha generado que sus ingresos disminuyan hasta 30%.
La gente sigue acudiendo a comprar a este centro de abasto, no obstante, teme a contagiarse de Covid-19, pero aseguran que tienen la necesidad de acudir para abastecer sus negocios de menudeo.
"No venimos con gusto, venimos más por necesidad, porque hay que seguir trabajando, aunque digan que hay que quedarse en la casa, para los pobres eso no nos funciona", comentó Luis, comerciante de Nezahualcóyotl.
Celia acompañada de su esposo Gerardo acudió a la Central de la alcaldía Iztacalco para comprar su despensa de la semana, aunque reconoce que no debería salir, aprovechó el fin de semana para comprar vivieres en la CEDA para ahorrar y apoyar a los comerciantes locales .
“Llegamos a la Central de Abasto para apoyar la economía de todos y ojalá ellos lo tomen en cuenta y no suban precios a lo loco”, comentó Gerardo.
Foto: Eduardo Hernández
