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Este fin de semana arrancaron los operativos en contra de la venta de celulares robados, bebidas embriagantes y medicamentos en tianguis y establecimientos de las 16 alcaldías de la capital.
Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Gobierno local, recordó que estos dispositivos se llevan a cabo tras reformar los lineamientos de operación de mercados móviles en la modalidad de tianguis, bazares y complementarios en la Ciudad.
En éstos, firmados por la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, quedó prohibida la venta de estos productos, así como realizar tatuajes, perforaciones y/o micropigmentación al aire libre.
Los operativos se realizan en coordinación con las secretarías de Gobierno, de Desarrollo Económico, de Seguridad Ciudadana, de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil, así como la Procuraduría General de Justicia locales.
La funcionaria explicó que las alcaldías realizarán visitas de forma sorpresiva, y en caso de que encuentren que alguien vende productos no permitidos, será causal de sanción e incluso de revocación del permiso de operación.
Sostuvo que el alcalde de Gustavo A. Madero, Francisco Chíguil, junto con la Subsecretaría de Programas de Alcaldías y Reordenamiento de la Vía Pública, en abril y junio lograron acuerdos con dos tianguis de dicha demarcación para evitar e inhibir la venta de bebidas alcohólicas, medicamentos y equipos de telecomunicación.
Puntualizó que en la primera etapa de este operativo se les dio a conocer a los comerciantes la disposición legal, como lo anunció la jefa de Gobierno.
Seguimiento. EL UNIVERSAL publicó que tras un recorrido por el tianguis de Las Torres, en Eje 6 Sur, se identificó un corredor de “chelerías” distribuidas a lo largo del mercado; puestos semifijos con sillas, mesas y música, una especie de bar en medio de un camellón.
Sin embargo, no sólo la venta de alcohol lo caracteriza, sino la cantidad de artículos que se pueden conseguir, como piezas para autos y motos, comida, celulares y ropa.
Tras la iniciativa del Gobierno capitalino, el descontento y malestar se hizo notorio entre los comerciantes que durante años radicaron sus ingresos en la preparación de bebidas alcohólicas para los visitantes de Las Torres.
Aunque en estos dispositivos se establece la prohibición de diversos productos, el Gobierno central se enfoca en la venta de celulares robados, pues es parte de la estrategia para combatir y disminuir el delito al máximo.
“Tomamos la decisión de hacer dos acciones. Una, incrementar las penas por el delito asociado a robo de celular, porque como lo he dicho, el celular ya no es cualquier objeto, tiene identidad y mucha información de la persona, y lo segundo es atajar el mercado ilegal de la venta de celulares en tianguis, bazares y concentraciones”, dijo hace unas semanas Sheinbaum.
Expuso que hay otras áreas en donde hay venta de teléfonos robados que se van a atender posteriormente, pero “en este momento había una parte muy importante en los tianguis y bazares. Creemos que ahí había que atenderlo de manera importante, porque habría crecido mucho su venta”.