Más Información
Seguridad federal atiende caso de dos niños asesinados en Sinaloa, tras irrupción en Palacio estatal; acompañan a familia
Canciller De la Fuente dialoga con su homóloga de Canadá, Mélanie Joly; revisan prioridades compartidas del T-MEC 2026
"México aumentaría su PIB en 1.4 puntos si Norteamérica sustituye 10% de importaciones chinas": Ramírez de la O
Fiscales generales se rebelan contra Trump; advierten que gobiernos locales no participarán en su política migratoria
Trump dispuesto a reunirse con Putin “inmediatamente” para negociar paz en Ucrania; Zelensky también está abierto a pactar, asegura
Carlos Alberto murió de dos balazos cuando estuvo a punto de golpear el auto de su agresor con un tabique, en calles de Iztapalapa
Poco después de la medianoche de este jueves, vecinos de la calle Miraflores , en la colonia Buenavista, reportaron disparos de arma de fuego.
Al lugar, ubicado casi en la esquina con avenida San Miguel, llegaron los policías. Ahí encontraron a Carlos Alberto Alcántara, de 28 años, quien yacía en el suelo y estaba ensangrentado, por eso pidieron la ayuda de paramédicos.
Al llegar al sitio, los rescatistas revisaron al hombre, quien se dedicaba a la carpintería, pero determinaron que ya había muerto.
Luis, quien dijo ser amigo de la víctima, platicó que ambos ingerían bebidas alcohólicas en ese lugar cuando llegó con ellos un hombre al que conocen como “El Moisito”.
Luego de cruzar algunas palabras, los hombres comenzaron a discutir, hasta que “El Moisito” se dirigió a un automóvil color gris, al cual subió.
En ese momento, Carlos Alberto agarró un bloque de cemento, con el que pretendía golpear el vehículo; sin embargo, “El Moisito”, al percatarse de ello, desenfundó un arma de fuego y le disparó al hombre de 28 años.
Tras el ataque, la víctima cayó al piso inconsciente hasta que murió, mientras que el agresor huyó a bordo del coche gris sobre la avenida San Miguel, con rumbo al norte.
Ahí también arribó Carlos Alcántara Jiménez, de 54 años y padre del fallecido, quien dijo que el atacante vivía frente al lugar donde ocurrió el hecho, pero se negó a dar mayor información.