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Las escuelas de distintos niveles, así como los centros educativos que se vieron obligados a cerrar sus puertas a consecuencia de la pandemia, fueron los lugares más afectados por la delincuencia durante poco más de un año que han dejado de funcionar, según reportes y denuncias presentadas ante la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ) que tiene contabilizados poco más de 24 robos a dicho inmuebles en diversas alcaldías.
Los objetos que principalmente sustrajeron fueron computadoras, aparatos electrónicos, impresoras, televisores, cableado, aires acondicionados o proyectores, instrumentos que son esenciales para la impartición de la educación desde el nivel básico hasta las universidades.
Al respecto, los agentes cercanos a la investigación consideran que los responsables son los llamados “delincuentes ocasionales” que sólo aprovechan la oportunidad para llevarse todo lo que pueden o encuentran a la mano.
En este sentido, la alcaldía que reportó el mayor número de asaltos de este tipo fue Iztapalapa, ahí se concentraron 18 de las 24 carpetas de investigación que se abrieron.
Ahí mismo, se denunció que lugares conocidos como Pilares o espacios públicos administrados por la alcaldía también fueron afectados. De esos lugares se robaron desde sillas y mesas de plástico, hasta tinacos y utensilios que se ocuparían para el beneficio de la propia comunidad.
Luego siguen las alcaldías de Tlalpan y Coyoacán, donde aunque el modus operandi es el mismo, los agentes que indagan los casos de manera aislada, pues descartan que se trate de una sola banda delictiva la responsable de todos los robos reportados, adjudicando los ilícitos al abandono en que permanecieron las instalaciones escolares.
Incluso, algunas de las denuncias de robos se reportaron una semana después de que ingresaran al recinto; no fue hasta que personal de limpieza acudió a desinfectar el lugar que alguien se percató de lo sucedido y avisaron a los propietarios de lo sucedido.
Por ejemplo, costa en la carpeta de investigación, FICOY/COY-2/UI-3C/D/00400/03-2021, que el fin de semana pasado se robaron una computadora HP, una chequera, 200 mil pesos en efectivo, la factura de un vehículo Nissan Sentra 2003 (que también se llevaron), micrófonos de la marca Steren, una laptop HP, así como documentos y papelería membretada del Sindicato Independiente Nacional de Trabajadores del Colegio de Bachilleres.
El lugar se ubica sobre la calzada de Tlalpan en las inmediaciones de la colonia Ciudad Jardín, de la alcaldía Coyoacán.
El sitio estaba cerrado, y a decir de los afectados, con un sistema de seguridad importante; sin embargo, dejaron de acudir al no tener actividades y no fue hasta la semana pasada que acudieron a limpiar, que se percataron del robo, y aunque había cámaras de seguridad, éstas estaban desactivadas, por lo que las autoridades no descartan que alguien de la escuela haya participado en el atraco o proporcionado información de lo que había ahí.
Como parte de la investigación, los agentes de la fiscalía capitalina se concentraron en rastrear los productos robados en casas de empeño o en Facebook Market, pero de momento no han encontrado nada.
De cualquier manera, implementaron un trabajo coordinado de revisión y patrullaje en las zonas con más denuncias. Las autoridades locales temen que una vez que se autorice el regreso a clases, las escuelas luzcan totalmente desmanteladas.
