A dos meses de inaugurada, el cable de la Línea 1 del Sistema de Transporte Cablebús, en la alcaldía Gustavo A. Madero, presenta un estiramiento de cuatro metros en el bucle que corre de la estación La Pastora a Cuautepec, con una longitud de siete kilómetros; no obstante, el rango de regulación es de siete metros, donde ya sería necesario un corte de cable.
“El cable empezó a alargarse mucho, ahora es estable, no sabemos si vamos a hacer el corte de cable en dos, cuatro, seis, ocho, 10 meses, nosotros cada día estamos verificando la posición, vemos el estiramiento que tiene, hablamos con la empresa Fatzer, la fabricante. Incluso, si ahorita hablamos para preguntar cuándo le hacemos el corte a su cable, me van a decir que no saben; pero les vamos a avisar mínimo con un mes antes, porque también tenemos que pensar en los usuarios”, comentó Konstantinos Panagiotou, CEO de la empresa Doppelmayr, que opera la Línea 1 del Cablebús.
En entrevista con EL UNIVERSAL, explicó que el recorte de un cable no es muy tardado y serían cerca de seis días.
“No desmantelamos todo, donde vamos a hacer el recorte, se agarra el cable de los dos lados y se estira, se hace el recorte, se hace el tejido y se suelta. No sé la fecha todavía, pero cuando estemos cerca, un mes antes, vamos a avisar para poner otro medio de transporte, no vamos a parar el sistema”, aseguró.
Destacó que pese a que hay más usuarios de los que tenían previstos en el estudio de viabilidad para la construcción de la línea, pues el estudio indicaba que lo utilizarían alrededor de 30 mil y actualmente el sistema ha alcanzado más de 50 mil usuarios, no es problema para la tensión del cable, pues el sistema está programado para más.
Destacó que el bucle dos es el que más se ha estirado, mismo que tiene 6.5 meses desde que se realizó el empalme del cable, es decir, que se instaló, aunque tiene dos meses de inaugurada la línea; en contraparte, el bucle que va de Indios Verdes a La Pastora, no presenta estiramiento, y su empalme inició el 9 de febrero de 2021.
El representante de Doppelmayr expuso que el recorte se realiza sólo una vez en la vida del cable, pero cuando se realiza, la vida útil es mayor. Incluso, destacó que, en su experiencia, los ajustes se realizan dos, 10, 11 meses y hasta dos años después de la instalación, pues los cables tienen diferentes resistencias.
Manifestó que algunos teleféricos han sufrido este tipo de ajustes como el de Mariche en Caracas, su corte de cable fue a los dos meses de su empalme; en la Línea Azul de La Paz, a los cinco; en el teleférico de Puerto Vallarta fue en 10 meses; el de Santo Domingo, en 11; y otros más han tenido el mismo mantenimiento.
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