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A fin de acabar con la corrupción y opacidad en el Poder Legislativo local, el Congreso capitalino y el Instituto de Transparencia, Acceso a la Información Pública, Protección de Datos Personales y Rendición de Cuentas de la Ciudad de México (Info) crearon un decálogo.
En conferencia, el presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), Mauricio Tabe, y la comisionada del Info María del Carmen Nava Polina aseguraron que en agosto próximo harán un corte de caja para conocer lo realizado en materia de transparencia sobre compras, rentas y obras efectuadas por el Poder Legislativo.
“Es decir, pretendemos coadyuvar a reducir el riesgo de procesos ilícitos, al vapor o sesgados en favor de un proveedor. Hacer del Congreso una caja de cristal, que cada día le cueste menos a los ciudadanos y donde cada peso se use de manera correcta”, dijo Tabe.
Recordaron que la elaboración del Decálogo para la transparencia en los procesos de adquisiciones, arrendamientos y obras en el Congreso de la Ciudad de México es un compromiso que firmaron ambas instituciones abril de 2019, con opinión del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) y recomendaciones de otras organizaciones de la sociedad civil.
“[El objetivo es] que las unidades administrativas del Congreso local se ajusten a nuevas medidas para la contratación de servicios y evitar sospechas e indicios de corrupción; que el mayor número posible de adquisiciones se concursen, participe el mayor número de ofertantes y sepan de las adquisiciones que realizará el [Poder Legislativo]. Que tengan tiempo para presentar sus ofertas”, detalló el también coordinador del PAN.
Aseguró que esta semana presentará de manera formal el decálogo ante la Jucopo, “con la finalidad de coadyuvar a reducir procesos ilícitos, al vapor o sesgados en favor de un proveedor”.
“No queremos favoritismos en las adquisiciones, sino condiciones de piso parejo para cualquiera que ofrezca bienes o servicios, y sea el Congreso, quien aproveche y saque ventaja de esto, no los servidores públicos que se coluden con proveedores”, enfatizó.
Explicó que el decálogo impulsa el uso de todas las plataformas digitales, para maximizar la publicidad de los procesos de adquisición, bases de licitación gratuitas, apertura total, esquemas de sesión públicas y transmisión vía internet, así como el uso excepcional de la figura de adjudicación directa.
“Es apostarle a mayor publicidad para prevenir la corrupción y establecer requisitos necesarios, para garantizar que todos compitan en igualdad de condiciones y no haya favoritismos ni acuerdos opacos que pongan en duda la honorabilidad de funcionarios”, dijo.
Mientras tanto, Nava Polina expuso que este documento incorpora las mejores prácticas en la materia, ya que representa un avance muy importante en pro de la transparencia y rendición de cuentas.
“Estamos en un momento oportuno, ya que es el primer trimestre de 2020, de tal manera que al ser parlamento abierto es una obligación constitucional que se establece en la Ciudad de México y éste es un paso muy importante para transparentar la vida interna del Congreso”, comentó.
Ambos coincidieron que estas acciones se basan en principios de buenas prácticas internacionales en la materia.
“Se busca eliminar la opacidad, es hacer del Congreso una caja de cristal, que le cueste menos a los ciudadanos y cada peso se use de forma correcta”, puntualizó Tabe.
