Chimalhuacán, Méx.- El cuerpo de Patricia es velado bajo una enorme lona blanca en el Barrio de San Pedro, muy cerca de lo que fue su hogar, que quedó destruido tras la explosión de pirotecnia, siniestro donde además murieron sus dos hijos Bryan y Jonathan de 29 y 21 años de edad.
En la explosión, la mujer de 52 años sufrió quemaduras en 90% de su cuerpo, lesiones que propiciaron su deceso en el Hospital General de Alta Especialidad de Zumpango, cinco días después de la explosión ocurrida el 15 de enero en el Barrio San Pablo parte alta.
La tarde de este 21 de enero, llegó al Barrio de San Pedro el féretro de madera de color café con el cuerpo de Patricia, quien será velada en la calle frente a la casa de sus familiares.
Patricia y sus hijos “eran muy trabajadores”, muy solidarios, íntegros, no tenían conflictos con nadie, Bryan y Jonathan eran solteros, pero esta tragedia prácticamente terminó con la familia Hidalgo Marrón de la que sobrevive una hermana de los jóvenes e hija de la difunta, así como su bebé, quienes fueron rescatados con vida de entre los escombros, señalaron vecinos.
La madre de familia será sepultada el miércoles 22 de enero en el panteón municipal de Chimalhuacán, por lo que familiares, vecinos y amigos la despiden con rezos y cantos durante esta noche.
La casa de la familia Hidalgo Marón, ubicada entre las calles Sor Juana Inés de La Cruz y 2 de marzo, en el Barrio San Pablo, quedó destruida sin techo, muros ni ventanas luego de la explosión de su taller de pirotecnia que operaba en el lugar, pues ellos eran artesanos de la pólvora desde hace una década.
Autoridades de Chimalhuacán lamentaron el fallecimiento de la mujer de 52 años, “quien de continuar con vida, tendría secuelas severas que no le hubieran permitido vivir con bienestar”, reconoció el director de Salud de Chimalhuacán, Sergio González Rosales.
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