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Entre reclamos y exigencias de diputados locales de Morena y aliados para justificar su petición de mayor presupuesto al estimado por la Secretaría de Administración y Finanzas para 2022, los alcaldes de oposición de Álvaro Obregón, Azcapotzalco y Benito Juárez pidieron que dejen de ver color, ideologías y partidos, pues únicamente buscan cumplir las necesidades vecinales.
Con estos tres funcionarios comenzó la pasarela en el Congreso local para que los 16 alcaldes y titulares de los órganos de gobierno hagan sus peticiones de recursos, debido a que Finanzas les notificó su techo presupuestal estimado para 2022, el cual les resulta insuficiente.
La primera en aparecer ante la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública fue la alcaldesa de Álvaro Obregón, Lía Limón García, quien dijo que los 3 mil 211.8 millones de pesos previstos para 2022 “es insuficiente”, por lo que pide 5 mil 754 millones 715 mil pesos.
“Con esto sólo podemos satisfacer la quinta parte de las necesidades reales. De ese tamaño es el rezago que enfrenta la alcaldía. De no hacerse esta inversión, seguiremos gastando en paliativos sin atender un problema urgente que sólo se agrava con el paso del tiempo”, advirtió.
Más tarde tocó turno a la alcaldesa de Azcapotzalco, Margarita Saldaña, quien requiere un presupuesto de 2 mil 127 millones 522 mil 635 pesos. Explicó que sólo son 190 millones extras al techo establecido por Finanzas, que equivale a mil 937 millones 522 mil 635 pesos.
Y al ver la incredulidad de los legisladores de Morena y aliados, la panista les aclaró: “No son aplazables estos proyectos, si no le damos mantenimiento no podemos dar respuesta a otras cuestiones”.
El alcalde de Benito Juárez, Santiago Taboada, pidió 2 mil 702.8 millones de pesos, de los cuales 429.8 millones son extras al techo asignado de 2 mil 263 millones de pesos, lo cual calificó de insuficiente, “pues más de 50% va al pago de nómina”.
Sin embargo, aceptó que sí hay un aumento con respecto a este año, “pero éste se concentra en el Capítulo 1000 [para salarios], y es ahí donde está reflejada la negociación con la clase trabajadora. Es un aumento en un capítulo del gasto que la alcaldía no puede utilizar para su política pública”, aclaró. Enfatizó que en ese capítulo requiere un aumento de 53.5 millones para cubrir la nómina, “que año con año debemos tomar presupuesto del año siguiente para pagar aguinaldos”.
