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Toluca, Méx.— El crecimiento del comercio informal alrededor de dos hospitales estatales de primer nivel, juzgados federales y la sede del PRI mexiquense es “incontrolable”, según los propios locatarios.
Son cerca de 100 los negocios en banquetas, algunos que obstruyen la calle Nicolás San Juan, donde venden desde caldos de gallina hasta pañales, sin que la autoridad municipal intervenga.
Irregularidades. Los propios locatarios admiten que realizan una actividad irregular desde hace ocho años y que dependen de una organización a la que pagan 250 pesos semanales para que les respeten los espacios y seguridad; sin embargo, se saben indefensos, pues comenzó la disputa de la plaza con otra agrupación el fin de semana y como resultado hubo un muerto.
Denunciaron que, a la par, incrementó el robo de autopartes en la zona “hemos visto a los que vienen a robar”.
Los locatarios temen hacer denuncias formales ante las autoridades, pues la organización que los controla los mantiene atemorizados.
Los locatarios —que piden reservar sus nombres por el temor a las represalias— aseguraron que no han visto cumplir las amenazas de los integrantes de la organización de Conasoc, que dirige Esmeralda de Luna Sánchez, también ex candidata del PRD a una diputación local.
Dicen que prefieren no iniciar una revuelta para no exponer su seguridad ni perder sus comercios, pero “sabemos que el asesinato del fin de semana nos coloca en el ojo de la autoridad”.
