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El Gobierno de la Ciudad de México se comprometió con activistas en derechos humanos y feministas para que se realicen protocolos de prevención, atención y erradicación de la violencia sexual por parte de la Guardia Nacional y elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC).
De acuerdo con el documento aprobado después de las reuniones que sostuvo la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, con las feministas, se avaló que no se abran carpetas de investigación por las manifestaciones del 12 y 16 de agosto, esta última que terminó en actos vandálicos en el Ángel y la Glorieta de Insurgentes.
Entre algunas de las peticiones que se pusieron sobre la mesa y que el Gobierno capitalino se comprometió a resolver a la brevedad están los avances en torno a la presunta violación por elementos de la SSC a una menor de edad en la alcaldía Azcapotzalco, además de otro caso que sucedió en el Museo de Fotografía y uno más en la colonia Tabacalera.
Asimismo, se analiza dar una disculpa pública por el hecho de que Claudia Sheinbaum llamó “provocaciones” a las manifestaciones, que hayan lanzado diamantina rosa al titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, Jesús Orta, y que se haya considerado sus acciones como discurso de “odio” del movimiento feminista.
También, que se cambie la narrativa y la manera en cómo se están dando a conocer los casos de violencia de género. Las feministas detallaron que seguirán defendiendo de manera pacífica las protestas para que no se criminalicen.
“Reiteramos que tenemos una necesidad de proteger nuestras vidas, y manifestamos es nuestro legítimo derecho”, externaron.
Dentro de la discusión se encuentra la declaratoria de la alerta de género en la capital del país y garantizar un protocolo de seguridad para las mujeres que transitan en las calles, además de transparentar la labor de los elementos policiacos.
