Con la noticia de que restaurantes pueden abrir siempre y cuando tengan espacios al aire, a los que nos gusta la pata de perro ya estamos haciendo planes para salir un poco del encierro en casa y apapacharnos con algo rico. Sin duda, el esfuerzo de los restauranteros en recibirnos con todas las medidas sanitarias para tener una mesa segura .
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Para mantener esta seguridad, nosotros, los visitantes también debemos poner de nuestra parte para que las mesas vecinas, meseros, hostess y cocineros también estén protegidos. Aquí algunos lineamientos que pueden ayudar:
1.-Déjate tomar la temperatura a la entrada
Es lo más básico y necesario que debemos hacer para que nos dejen ingresar a cualquier lugar. Acepta el gel antibacterial y limpia tus zapatos.
2.- Registra tu visita
En menos de un minuto puedes escanear el código QR. Esto facilita las cosas por si hay un caso de contagio.
Foto: Pixabay
3.- Si te levantas de tu mesa ponte el cubrebocas
Ya sea que tengas que salir del lugar a atender una llamada o tengas que ir al baño, ponte el cubrebocas. Recuerda que así las partículas de saliva no se esparcen por el aire. Cuando regreses a tu lugar, guarda tu cubreboca en una bolsa de papel kraft, no lo dejes sobre la mesa sin protección.
4.- No hagas sobremesa
Nos encanta platicar y platicar después de comer, pero en estos tiempos hay que pensar en los comensales que vienen detrás de nosotros. Ellos también quieren salir de casa y disfrutar un buen plato de su chef favorito. 60 minutos son suficientes para comer.
5.- Respeta el horario y reserva
Con el programa Al Aire Libre , gobierno de la CDMX establece que los restaurantes tienen un horario de operación de 7:00 de la mañana a 6:00 de la tarde. Planifica tu llegada y reserva para que puedas asegurar tu estancia.
Foto: Pixabay
6.- Grupos de cuatro
La capacidad máxima por mesa es de cuatro personas, toma esto en cuenta. Si van cinco o más, además de tener reservación, deberán comprender que no pueden juntar las mesas.
7.- Deja propina
Recuerda que los meseros tienen el salario mínimo, y nunca caen mal unos pesitos extra en la bolsa.
Arte: Neta Comunica