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Entre todos los superalimentos que existen para mejorar la salud del cuerpo, hay uno en particular que ha ganado popularidad gracias a su cantidad de nutrientes: las semillas de chía.
Sobre las bondades de su consumo podemos mencionar la prevención de enfermedades cardíacas, la regulación del sistema digestivo y la saciedad que nos da para controlar el apetito.
Como todo alimento, debemos tener cuidado con las cantidades que ingerimos y es que algunos componentes de la chía podrían perjudicar a cierto grupo de personas. En Menú te explicamos quiénes no deberían comerlas.
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¿Cuáles son las contraindicaciones de la chía?
Las semillas de chía las podemos comer espolvoreadas en yogurt con frutas, mediante preparaciones de jugos, licuados y agua o agregarlas enteras a nuestras ensaladas, pastas y aderezos.
No obstante, antes de integrarlas a las comidas debemos prestar atención a sus contraindicaciones, por ejemplo:
Si estás tomando medicamentos para la presión arterial, toma en cuenta que el consumo excesivo de las semillas puede reducir la presión sanguínea y disminuir los efectos de los fármacos en tu cuerpo.
Asimismo, las personas que toman anticoagulantes deben evitar comerlas. ¿A qué se debe? De acuerdo con información de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla, la chía aumenta el riesgo de sufrir hemorragias o sangrados.
Por otra parte, quienes tienen alergias a los frutos secos o las plantas pertenecientes a la misma familia de la Salvia hispánica tienen que pensar dos veces antes de comer las semillas.
Salvia hispánica es el nombre científico de la chía. En caso de alergia o intolerancia a sus componentes, será necesario acudir con médico para tratar los síntomas.
¿Por qué las semillas de chía son tan populares?
¿Te has preguntado por qué son populares? Pues bien, las semillas de chía son ricas en omega-3. Este nutriente se compone de grasas saludables que el cuerpo necesita para fortalecer las neuronas y mantener al corazón en buen estado.
Nuestro organismo no lo produce naturalmente, explica MedlinePlus. Es por ello que las personas buscan alimentos con altos niveles de omega-3, como lo pueden ser pescados, frutos secos y chía.
Además, dado que son ricas en fibra soluble, combaten el estreñimiento, mejoran la flora intestinal e incluso reducen la presencia de colesterol malo (LDL) en la sangre. Mientras que sus antioxidantes mantienen fuertes los huesos, el sistema nervioso e impiden el deterioro de las células.
Gracias a esto, las semillas de chía son consideradas un superalimento, es decir, poseen mayores nutrientes que el promedio de comestibles, explica la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla.
¿Quieres comerlas? Asegúrate de no estar dentro del grupo de personas que deben moderar la ingesta de chía. Otra opción consiste en preguntar a un especialista si el consumo es apropiado para ti.
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