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Un reciente estudio ha revelado que los utensilios de color negro, que utilizamos en la cocina, podrían ser nocivos para la salud. ¿La razón? Al entrar en contacto con el calor liberan sustancias químicas que migran a los alimentos. Hoy en Menú te explicamos a fondo el tema.
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¿Porque es peligroso usar utensilios de color negro?
Este estudio realizado por Toxic-Free-Future y el Instituto de Ámsterdam para la Vida y el Medio Ambiente, de la Universidad Libre de Ámsterdam, señala que algunos utensilios negros están compuestos por microplásticos, mismos que pueden dañar la salud al entrar en contacto con los alimentos.
Además, se ha encontrado que, en su mayoría, contienen retardantes de llama, sustancias añadidas para hacerlos más resistentes a las altas temperaturas. Dichos compuestos están presentes en diversos productos de plástico, como cucharas, platos, vasos y contenedores de comida rápida.
De acuerdo con la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, los retardantes de llama son mezclas de químicos artificiales que se añaden a diversos materiales con el fin de reducir su inflamabilidad. Comúnmente se agregan a plásticos, textiles y equipos eléctricos o electrodomésticos.
Originalmente, se añadían a espátulas y cucharas para hacerlas resistentes al calor. Sin embargo, diversas investigaciones han descubierto que estas sustancias son perjudiciales para la salud. Por ello, en varios países se ha comenzado a prohibir su fabricación y venta.
Siguiendo con el mismo estudio publicado en la revista Chemosphere, especializada en temas ambientales, se identificaron retardantes de llama tóxicos en 17 de 20 artículos analizados (entre ellos, vajillas, utensilios de cocina, accesorios para el cabello y juguetes infantiles).
Aunque la liberación de estas sustancias es gradual, ya que solo las utilizamos para voltear o mover la comida, con el paso del tiempo terminamos por consumirlas sin darnos cuenta.
¿Cómo afectan los retardantes de llama al cuerpo?
De acuerdo con el Instituto Nacional de Ciencias de la Salud Ambiental de Estados Unidos, los retardantes de llama podrían causar alteraciones endocrinas y tiroideas, inmunotoxicidad, toxicidad reproductiva, efectos adversos sobre el desarrollo fetal e infantil y disfunción neuroconductual.
Los niños son especialmente vulnerables, ya que su cerebro y otros órganos están en desarrollo. Además, las mujeres embarazadas expuestas a dichas sustancias podrían enfrentar un mayor riesgo de parto prematuro, según investigaciones financiadas por la misma institución.
Aunque las investigaciones sobre los efectos de los retardantes de llama siguen abriéndose a nuevos campos, los expertos recomiendan limitar el uso de utensilios de plástico negro y sustituirlos por utensilios de madera.
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