La temperatura marca arriba de los 30 grados. Es un día de otoño templado de costa y estoy recorriendo este malecón, uno de los más grandes de México y del mundo. Sí, he llegado a la famosa La Perla del Pacífico y su hermoso malecón transcurre ante mis ojos a bordo de una ‘pulmonia’, esos taxis tan peculiares de Mazatlán cuyo parentesco más cercano son los carritos de golf. La radio de la pulmonia toca a todo volumen un corrido y el chofer lo canta, lo tararea, lo siente en su corazón mazatleco y yo me contagio y también quiero cantar esas historias de aventura y desamor al ritmo de la tambora.
Pero no sé la letra y recuerdo que estoy aquí en una misión distinta, una si acaso más mundana y, sin embargo, cargada de otro sabor: estoy en busca de los aguachiles de Mazatlán, los originales, los guerreros de las calles.
Capítulo II: Aguachile y ceviche
Comer en Mazatlán es vagar por las calles en busca de la siguiente carreta de ceviche. Todas son lindas y muchas de ellas, debido al éxito, han pasado de ser pequeños carritos ambulantes a negocios con un local. Una variedad de salsas rojas estilo botanera adornan cada puesto y los ingredientes son básicos: jitomate, cebolla morada, aguacate, pepino, limón y sal. Acompañamientos: galletas saladas, tostaditas. Instrumento culinario: los palillos pa’ picar.
MENÚ RECOMIENDA
El Cuchupetas
Una de las marisquerías más emblemáticas de la región.
Dirección: Jesús carranza 301, col. Centro, Villa Unión, Sinaloa.
Mariscos El Beto
Un carrito con mesas en la banqueta. Especialidad: paté de camarón.
Dirección: Calle Sonora esq. La Marina, Mazatlán.
Mariscos Los Polines
Regenteado por los hermanos Coronado. ¿Qué pedir? Callos y pulpos preparados.
Dirección: Calle Melchor Ocampo 907, Mazatlán.
El Changuirongo
Su aguachile de camarón está bien rico y también su ceviche de sierra.
Dirección: Calle General Francisco Serrano, esq. Calle 21 de Marzo.