Sin lugar a dudas, 2017 fue un año de grandes descubrimientos... de vinícolas y destilerías, de regiones productoras en resurgimiento, de nuevas ideas embotelladas y notables mejoras en viejas y conocidas etiquetas. Ciertamente, también fue un año de consolidación de proyectos. Para Menú, el espacio que alberga cada semana a esta Vinícola en Tinta , 2017 fue el punto de partida de la primera edición de la Guía Universal de Vinos Mexicanos , un compendio dedicado a reconocer la labor de decenas de productores vitivinícolas de todo el país. Hace algún tiempo escuché la pregunta de un colega de oficio: “¿en qué ayuda a la industria otra guía de vino mexicano ?”. Si se trata de un listado en el que las bodegas pagan altas sumas de dinero por aparecer, así simplemente, la respuesta es: ¡en nada! Desde su concepción, a finales del 2016, me tocó estar muy cerca de la organización editorial de la Guía Universal de Vinos Mexicanos . La idea de Natalia de la Rosa, principal artífice del proyecto, era ofrecer una herramienta de consulta real, objetiva, incluyente y, sobre todo, gratuita. El resultado superó, a mi juicio, todas las expectativas. Déjeme contarle. Lo primero a destacar fue la participación de bodegas: voluminosas, grandes, medianas, chicas y todo aquel productor que deseara formar parte del ejercicio. Todas las etiquetas participantes se recibieron e incluyeron en el panel de cata de forma gratuita, alcanzando un total de 160 vinos procedentes de todo el territorio nacional. ¿La cata? Se realizó totalmente a ciegas, en bloques divididos por categorías: espumosos, espumosos rosados, blancos, rosados, tintos, generosos, dulces…Por último, el panel de cata, estuvo integrado por expertos de la talla de José Sandoval, Laura Santander, René Rentería y Sandra Fernández . Claramente, los resultados del ejercicio no se ostentan como máximas absolutas, de esas estilo Robert Parker, sino que buscan compartir una opinión realista y honesta de los vinos que actualmente se producen en México desde la perspectiva de un grupo de estudiosos del tema.
“¡Resultados!, ¡resultados…!”. Vamos, pues. En lo más alto del podio: Solera Blanco y Chenin Blanc 2016, de Bodegas de Santo Tomás ; Sauvignon Blanc Viña Kristel 2016, de Monte Xanic ; Capricornius 2015, de El Cielo ; Viña Doña Dolores Semi Seco, de Finca Sala Vivé by Freixenet ; Duquesa Rosado 2016, de Vino de la Reina ; Uriel 2016, de Adobe Guadalupe ; V Rosado 2016 y Casa Grande Gran Reserva Shiraz 2013, de Casa Madero ; Cabernet Sauvignon 2015, de Finca la Carrodilla , y Mariatinto 2015. Bodegas voluminosas, grandes, medianas, chicas… Concluiré repitiéndole que las guías son eso justamente: GUÍAS. No importan precios, galardones o puntuaciones ofrecidas por afamados catadores, el mejor vino es aquel que hace vibrar SU paladar. Nos vemos en 2018.