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En el corazón de la Roma Norte, en el primer piso de una casona porfiriana con sutiles atisbos futuristas, se encuentra Fónico, un restaurante que desde hace varios años busca reflejar la diversidad del México moderno a través de una cocina libre, atrevida y espontánea.
Para conmemorar este camino, el mes pasado Fónico celebró su cuarto aniversario con una noche inolvidable y en Menú te contamos todos los detalles.
Para la ocasión, el chef Billy Maldonado recibió a dos chefs galardonados con una estrella Michelin: Jonatán Gómez Luna, de Le Chique en la Riviera Maya, y Rodrigo Rivera Río, de KOLI Cocina de Origen en Monterrey, con el propósito de ofrecer a los comensales un exclusivo menú de degustación de siete tiempos, creado especialmente para la celebración.
“Nos da un enorme gusto compartir con nuestros clientes, invitados y amigos a esta experiencia con dos chefs invitados, grandes leyendas vivas de la gastronomía mexicana contemporánea. Nos sentimos muy honrados de que compartan su talento esta noche, para conmemorar los cuatro años de Fónico", declaró Víctor Garibay, dueño y fundador del restaurante.
"Será una noche realmente inolvidable para quienes nos acompañen”, concluyó.
Por si fuera poco, el menú tuvo un exclusivo maridaje cortesía de etiquetas seleccionadas de Tequila 1800, Bodegas Domecq y Dominio Fournier.
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Menú degustación por el cuarto aniversario de Fónico
La experiencia comenzó con una mezcalita refrescante, una mezcla sublime de pepino, sauco, tepestate y lima yucateca, presentada en una esfera de chocolate blanco que estallaba suavemente en la boca, liberando una explosión de sabores vibrantes, cortesía de Le Chique.
A continuación, llegó un intrigante bocado titulado "El meteorito que se convirtió en atropellado", una reinterpretación innovadora de un platillo tradicional de Monterrey, donde la carne seca guisada en salsa se transforma en una bolita crujiente que sorprendió al paladar, cortesía de KOLI Cocina de Origen.
El primer tiempo, también a cargo de KOLI, fue un plato titulado "Entre líneas y sabores de Olga Hernández", una combinación exquisita de jocoque, frijol, nopal y sandía que sorprendió por su peculiar emplatado. Después, Fónico presentó una sopa aterciopelada de zanahoria confitada, reconfortante y sedosa, que envolvía el paladar con su suavidad.
El siguiente tiempo fue obra de Le Chique, un pato añejado bañado en chichilo negro, acompañado de berenjena tatemada, un plato que resaltó la complejidad y profundidad de los sabores ahumados y terrosos.
Luego llegó el plato titulado "La quema de la candelilla" de KOLI, una picaña SRF, acompañada de ajo negro, cenizas, coliflor y betabel, una deliciosa combinación que evocaba los populares asados norteños con majestuosidad .
Para cerrar con broche de oro, una nube cítrica floral, con la frescura de las violetas, el yogurt, el lomo caramelizado y un toque de bergamota, cortesía de Le Chique llegó a la mesa. Finalmente, Fónico ofreció una esfera crocante de melocotón, rellena de crema suave y coronada con un granizado de lychee y un toque de pulque, para cerrar la velada de manera memorable.
