Las infusiones de manzanilla y jengibre por si mismas son sumamente beneficiosas, cuyos efectos son conocidos y utilizados para aliviar un gran número de síntomas. Juntos, estos dos ingredientes pueden ayudar aún más. Descubre qué beneficios tiene para tu salud esta infusión aquí en .

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Infusión de jengibre y manzanilla. Foto: Işıl / Pexels
Infusión de jengibre y manzanilla. Foto: Işıl / Pexels

Desinflamatoria

Es bien conocido que la manzanilla es ideal para desinflamar. Es usada para padecimientos estomacales, pues es capaz de reducir malestares en el intestino, como la indigestión, náuseas, y hasta algunas úlceras o problemas gástricos. También se suele utilizar para desinflamar las vías respiratorias tras un resfriado, abrir los bronquios y favorecer la salud.

Ayuda a tu sistema inmune

Además de la manzanilla, el jengibre también favorece a la recuperación de los síntomas del resfriado por sus niveles de zinc, y gracias a sus efectos expectorantes, ayuda deshacer la congestión permitiendo una mejor respiración, la reducción de la toz y el dolor de garganta.

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Infusión de jengibre y manzanilla. Foto: Cup of Couple / Pexels
Infusión de jengibre y manzanilla. Foto: Cup of Couple / Pexels

Puede ayudar a prevenir el cáncer

Tanto la manzanilla como el jengibre han sido objetos de estudios médicos que buscan avalar las propiedades de ambos alimentos para prevenir el cáncer.

Un estudio publicado en el National Center for Biotechnology Information (NCBI) explica que la manzanilla contiene terpenoides y flavonoides que contribuyen a reducir viabilidad celular de diversos tipos de cáncer. Por su parte, el jengibre es ideal para personas que llevan un tratamiento por quimioterapia pues es capaz de reducir el malestar general que provoca este proceso al cuerpo como las náuseas.

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¿Cómo hacer una infusión de manzanilla con jengibre?

Ingredientes

  • 1 tza. de agua
  • 2 rodajas de jengibre
  • 1 cdita. de flores de manzanilla

Preparación

  1. Pela un poco de jengibre y córtalo en dos rodajas de dos centímetros.
  2. Pon a calentar la taza de agua a fuego medio hasta llegar al punto de ebullición.
  3. Añade el jengibre y baja el fuego. Espera 5 minutos y retira de la flama.
  4. Agrega las flores de manzanilla. Espera entre 5 y 10 minutos a que infusione.
  5. Cuela y sirve en tu taza favorita.
  6. Puedes endulzar con miel si lo prefieres o añadir el jugo de medio limón para intensificar las propiedades.
Infusión de jengibre y manzanilla. Foto: 
Tatiane Herder / Pexels
Infusión de jengibre y manzanilla. Foto: Tatiane Herder / Pexels

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Así de sencillo tienes una infusión llena de propiedades benéficas para tu cuerpo. Si bien, no es una bebida milagrosa, si puede ayudarte frente a algunos síntomas derivados de enfermedades respiratorias o de algunos tratamientos médicos como las quimioterapias. Recuerda siempre consultar a de la salud ante cualquier cambio brusco en tu alimentación diaria.

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