El cuerpo humano podría sobrevivir sin azúcar, pero no puede hacerlo sin el sodio. El sodio es un mineral indispensable para la vida y está presente en casi todos los alimentos. Es regulado por los riñones y controla el equilibrio de líquidos en el cuerpo, además de ayudar a estimular los músculos.
Sin embargo, el exceso en su consumo trae consigo problemas en la salud ya que se incrementa el riesgo de padecer alguna enfermedad cardiovascular. Es por ello que se recomienda la ingesta de alimentos con bajo contenido de sodio, como frutas y verduras frescas, así como leguminosas.
De acuerdo con la Fundación Española del Corazón , el exceso de sodio retiene líquidos y con ello se genera una presión alta en las arterias. Es importante cuidar las cantidades de este mineral que comemos pues los problemas cardiovasculares terminaron en 2016 con 17.6 millones de muertes : que representa el 32% del total de las muertes a nivel mundial.
El consumo diario de sodio recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) es de 2,000 miligramos al día: que equivalen a 5 gramos de sal en adultos. De acuerdo con la experta en nutrición Fernanda Alvarado, el consumo promedio de sodio es de 3,400 mg y la sugerencia es que se ingiera entre 1,500 y 2,300 mg. Mientras que las personas con diabetes o enfermedades cardiovasculares deberían consumir 1,500 mg.
Una buena forma de reducir el consumo de sodio es evitar la comida preempacada y procesada. Nuestra experta en nutrición señala que algunos de los alimentos con mayor nivel de sodio son pizzas, pan dulce, sándwiches, mantequilla, condimentos y embutidos.