"El Centro Histórico capitalino se ha llenado de alegría, de múltiples expresiones culturales y artísticas, así como de una gran variedad de sabores. Hay toda una tradición restaurantera enmarcada con el nombre de grandes establecimientos que marcaron época, pero también hay una oleada de jóvenes cocineros y empresarios que están integrando un mapa muy interesante de opciones tanto para los comensales nacionales como para los extranjeros", expresa Ilhmar Kamar , copropietaria del restaurante Bechamel , en la emblemática calle de 16 de septiembre, en un entorno de edificios históricos que recuerdan la monumentalidad de la era porfiriana, hoy remozada y revestida de luces, de añorazas, de un redimensionamiento urbanístico que reitera la condición del primer cuadro como un centro de vitalidad, de búsqueda, de convivencia.
Con una labor profesional en el segmento diplomático, lo que la llevó a viajar por diversos países, conocer sus culturas y sus cocinas, Kamar emprendió la aventura, junto con el chef español Daniel Fernández , de desarrollar un espacio cálido, informal e imaginativo que animara al goce de los sabores esenciales y lúdicos de las cocinas de México y España.
"Daniel es un cocinero que también emprendió una ruta de trabajo fuera de su patria, principalmente en Asia, donde desarrolló diversos establecimientos y conceptos culinarios de culinaria española, principalmente en torno al tema de las tapas. Fue un nicho en el que tuvo mucho éxito. Cuando platicamos la posibilidad de abrir algo en México, pensamos en un sitio que expresara la esencia y la emotividad de dos culturas muy cercanas, y que fuera el nudo de una propuesta restaurantera que animara a la convivencia y a la celebración.
"Bajo el concepto de cocina mexpañola , desarrollamos una cocina de tapeo, de compartir en torno a la mesa con sabores e ingredientes muy clásicos de la culinaria española, en el contexto de esencias y matices de México. En ese sentido, las típicas croquetas se ha posicionado como la preparación representativa de nuestro establecimiento, partiendo desde las versiones más típicas hasta otras que son una muestra de ingenio y de licencia al antojo. Después de un año de operaciones, la gente ya nos reconoce por nuestras croquetas. Fue algo muy complicado en un inicio, porque algo tan conocido y cotidiano de la cocina española en México es algo no tan difundido. Cuando hablábamos de croquetas la gente nos preguntaba: '¿Qué, hacen croquetas para perros?'", refiere Kamar.
Destaca que actualmente muchos de sus comensales llegan con la idea de disfrutar de un buen plato de croquetas, en sintonía con una sangría, una cerveza o una copa de vino. "Tenemos desde la tradicional de jamón serrano; así como de pescado con mayonesa de alcaparras, pollo con salsa de mango y curry, chorizo con salsa de setas, camarón con mayonesa chipotle y chorizo y queso gouda con salsa de habanero y zarzamora; entre otras".
En el panorama de las croquetas dulces, añade, resaltan las de queso de cabra y manzana con salsa de miel; arándanos con salsa de chocolate; al igual que las de nutella. "La gente ha aceptado muy bien nuestro concepto, y poco a poco van explorando otras opciones que tenemos en carta, como las tapas tradicionales, las paellas y el gazpacho, y otras especialidades típicas como la fabada.
"Sin embargo la cocina mexicana igualmente brilla en nuestros menús con preparaciones como la trilogía de sopes de chorizo, pollo y arrachera con cebollita encurtida y guacamole; las enmoladas de camarón bañadas con el mole de la casa, con queso y crema; y el rollo Rollo de pollo relleno de cuitlacoche en salsa de poblano", precisa.
"Estamos situados en un punto en el que confluyen diversos segmentos de la población, además de la evidente afluencia de turistas. Esto nos invita a ser siempre imaginativos, a mostrar lo mejor de las culturas que están inmersas en nuestra cocina y dejar un buen sabor de boca no solo en lo que se refiere al plato que llevamos a la mesa, sino también en la atención y en la manera en que exponemos estos sabores, que para algunos son una auténtica iniciación sensorial", precisa Ilhmar Kamar .
Restaurante Bechamel
D. 16 de septiembre 61, piso 2, Centro Histórico, Ciudad de México
T. (55) 5518-6038
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