Miami.— El reciente asesinato del CEO de UnitedHealth Group, , muestra el descontento con las ; el caso, indican las autoridades, parece haber sido un ataque directo. Según medios locales, como el The Washington Post, el asesino “se convirtió en un símbolo de la tan despreciada industria de los seguros de salud”.

En la escena del crimen, la policía encontró tres casquillos con las palabras deny (negar), defend (defender) y depose (deponer).

Un especialista con conocimiento de cómo funcionan internamente las empresas de seguros médicos y su lenguaje confirmó a EL UNIVERSAL que la palabra deny representa la práctica de rechazar reclamos, una estrategia que las aseguradoras utilizan para minimizar pagos; defend alude a la defensa legal agresiva que emplean para justificar estas negaciones, y depose , en el ámbito legal, se refiere a interrogar bajo juramento para desacreditar reclamos en litigios.

Lee también:

“La elección de estas palabras sugiere que el asesinato conoce su significado y pudo ser un acto de protesta o venganza contra las prácticas de la industria. Aunque no se justifica la violencia, el crimen refleja un nivel de descontento social, de frustración y desesperación”, comenta el especialista. “Lo que le pasó a Thompson no es justificable, pero entiendo el dolor de alguien que pierde todo porque una aseguradora decide que tu vida no vale el costo del tratamiento”, expresó un usuario en redes sociales.

Según un informe de la Kaiser Family Foundation, 17% de los reclamos en el mercado individual fueron denegados en 2019, mientras que menos de 0.2% de estas denegaciones fueron apeladas.

Una investigación de 2021 encontró que 38% de los asegurados enfrentaron obstáculos al intentar obtener cobertura para medicamentos recetados. Entre los pacientes con enfermedades graves, 47% reportó que sus condiciones empeoraron debido a retrasos o denegaciones en la cobertura. A lo largo de los años, numerosos casos han expuesto las prácticas problemáticas de las aseguradoras, alimentando el descontento público.

Lee también: VIDEO: Así fue el momento del asesinato del empresario Brian Thompson en Nueva York; cámara grabó el homicidio

Los asegurados deben enfrentar varios costos adicionales, como deducibles, copagos y coseguros, lo que significa que incluso con un seguro, los pacientes a menudo deben asumir una parte significativa de los costos. Cuando un cliente desea utilizar el beneficio sigue un proceso que involucra varios pasos. Este proceso puede variar según el tipo de seguro, pero en términos generales se puede decir que el primer paso es verificar la cobertura ya que el cliente debe asegurarse de que el servicio o tratamiento que necesita esté cubierto por su póliza.

De ahí debe obtener autorización previa, en caso de que esto sea necesario. Al final, el cliente ya puede acudir al proveedor médico, que debe verificar los datos del seguro y, dependiendo del plan, el asegurado puede pagar o no un copago al momento del servicio.

Si bien es cierto que “en decenas de miles de casos las aseguradoras estadounidenses cumplen su parte de cubrir las coberturas de muchos de sus clientes, también es cierto que hay un alto porcentaje donde no se autoriza esa cobertura debido a argumentos de las aseguradoras que no necesariamente son ciertos o válidos”, explica el médico Enrique Martínez, desde California, a este medio. Algunos de estos problemas se deben a lo que en el ámbito de seguros médicos se le llama Criterios de Negación de Cobertura, es decir, que las aseguradoras pueden negar tratamientos alegando que no son “médicamente necesarios” o que son “experimentales”.

Lee también:

“Me negaron un tratamiento para el cáncer porque decían que era experimental. ¿Cómo puede ser experimental si mi oncólogo lo recomienda?”, escribió en X un paciente quejándose de su aseguradora.

Otro problema es la burocracia y los procesos largos.

Uno de los asuntos que más molestan y frustran a los asegurados es cuando reciben facturas inesperadas. “Esto sucede cuando un paciente que hizo uso de su cobertura, le avisan que el hospital o el médico que lo atendió no están dentro de la red contratada”, dice Martínez, “y no les importa si se trataba de una de emergencia, se los cobran”.

El caso de Thompson ha intensificado el debate público sobre las aseguradoras médicas. En un sistema donde las personas dependen de su seguro; la desconfianza hacia las empresas que supuestamente deben protegerlos está alcanzando un punto crítico.

Únete a nuestro canal ¡EL UNIVERSAL ya está en Whatsapp!, desde tu dispositivo móvil entérate de las noticias más relevantes del día, artículos de opinión, entretenimiento, tendencias y más.


Comentarios