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Oaxaca.— La quiebra del sistema de pensiones y jubilaciones de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO) es inminente y mantiene el riesgo de un colapso financiero a la institución si no se reforma, según un estudio de la empresa Valuaciones Actuariales del Norte S. C., tras una convocatoria emitida por la Secretaría de Educación Pública (SEP).
Actualmente, el sistema absorbe 30% del presupuesto de la UABJO, que para este año fue de mil 49 millones de pesos, pero con la suma de las prestaciones laborales que no son reconocidas por la SEP representa 40% de sus recursos.
Lo anterior debido a que, de acuerdo con un informe realizado por investigadores de la Facultad de Contaduría y Administración (FCA), los trabajadores jubilados tienen doble pensión: una por conducto del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y otra por parte de la universidad, puesto que el Contrato Colectivo de Trabajo les otorga prestaciones en especie y financieras, independientemente de las que les brinda el IMSS.
La universidad da al jubilado 100% del último salario que tuvieron al momento de retiro, más las prestaciones que tenía como activo y que se incrementan conforme aumenten las prestaciones tanto en especie como económicas.
Hasta diciembre de 2016, se contaba con una reserva de 110.6 millones de pesos, generados por los subsidios federales y universitarios, que resultan insuficientes para hacer frente a las obligaciones por concepto de pensiones.
Para el año 2020, el número de jubilados alcanzará la tercera parte de los empleados activos y cuatro años después, 50%.
Actualmente, la UABJO enfrenta un déficit superior a los 300 millones de pesos, provocado por su sistema de pensiones y jubilaciones, que afecta directamente a la nómina de los trabajadores activos.
Para el cierre de 2019, por ejemplo, la institución requiere de más de 130 millones de pesos para cubrir sus compromisos de pago de salarios y prestaciones.
“En nuestra casa de estudios, desafortunadamente, tenemos un esquema que consiste en la doble jubilación: paga el seguro social y paga la universidad, jubilaciones dinámicas, actualizaciones de salarios, al grado de que en estos momentos para trabajadores universitarios es mucho más conveniente ser jubilados que activos.
“Los costos los asumen los trabajadores en activo”, reconoce el rector Eduardo Bautista Martínez.
Valuaciones Actuariales del Norte advierte que las causas principales que ponen en crisis el sistema de pensiones son el incremento en la esperanza de vida, la disminución de la tasa de natalidad, la inexistencia de normatividad para la creación de reservas, reconocimiento de antigüedad, tasas bajas de interés, insuficiencia de aportaciones e inexistencia de sueldo regulador.
Además, concluye que de no realizarse una reforma al sistema de pensiones y prestaciones de la UABJO, éste quedará en manos del gobierno federal, estableciendo las reglas y condiciones que seguramente no serán las de mayor apoyo a los trabajadores.
De acuerdo con el estudio, una reforma tendrá beneficios como el que la pensión sea vitalicia con transmisión a beneficiarios (actualmente no se permite).
Destaca que será posible pensionarse por jubilación (la única forma que se permite actualmente), vejez, retiro anticipado, incapacidad por causas ajenas al servicio e incapacidad por riesgos de trabajo.
Una vez realizada la reforma, señala que será urgente la creación de un fideicomiso de administración e iniciar las gestiones ante los gobiernos estatal y federal para obtener recursos que se integren al fondo de pensiones. “Lo que requerimos en este momento es sensibilidad y disposición [de los sindicatos]”, dice el rector de la UABJO.