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Monterrey, NL.- El alcalde de Cadereyta Jiménez, Nuevo León, Ernesto Quintanilla Villarreal, quien el domingo pasado fue objeto de un ataque directo contra sus escoltas por un grupo de hombres armados que estaban frente a su domicilio, afirmó que reforzará las acciones y no cejará hasta lograr que los habitantes de su municipio tengan la paz y la tranquilidad a las que aspiran.
El funcionario dio a conocer que entre las primeras acciones está la toma del mando de la vigilancia policiaca por parte de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal , labor que había estado a cargo de corporación estatal Fuerza Civil. Explicó que ambas corporaciones se dividirán y se responsabilizarán de la vigilancia por zonas.
Asimismo se adquirirán 20 nuevas patrullas, 20 motocicletas y dos ambulancias, para mejorar el equipamiento de la policía municipal, y atender las emergencias de apoyo a la población. Además se creará la Policía de Proximidad y habrá intervención en las escuelas con brigadas de prevención.
Aunque el alcalde reiteró que no había recibido amenazas, consideró que el ataque directo a sus escoltas y a su residencia, debe ser porque está haciendo las cosas bien, enfrentando los temas álgidos en materia de seguridad, esfuerzo que se redoblará ahora con la coordinación entre municipio, estado y federación.
El gobernador, Jaime Rodríguez, comentó por su parte que el primer objetivo de los delincuentes es la autoridad y en este caso quien toma las decisiones en el municipio es el alcalde. Sin embargo, señaló, no deben retrotraerse de su función por acciones que tome la delincuencia para tratar de amedrentarlos.
Señaló el Bronco que a los pocos minutos del ataque habló con el alcalde Ernesto Quintanilla, y ofreció apoyarlo en lo que necesite para su seguridad y del municipio que gobierna.
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