Chihuahua.— Tras 14 días de medidas restrictivas de movilidad extraordinaria, especialmente los fines de semana, el Consejo Estatal de Salud anunció que éstas quedaron suspendidas, aunque la entidad continúa en semáforo rojo.
El pasado 6 de noviembre, el gobernador Javier Corral Jurado anunció que, debido al alto índice de contagios por Covid-19, así como a la saturación de hospitales, era necesario activar un protocolo extraordinario que restringiera la movilización.
Desde ese día, quedó suspendido el transporte público, la apertura de supermercados y la actividad de la industria manufacturera los fines de semana.
De igual manera se estableció ley seca a partir del día jueves y el cierre de toda actividad económica los siete días de la semana a partir de las 19:00 horas.
Ayer, el Consejo Estatal de Salud determinó que, tras dos semanas de restricción, la entidad se mantiene en el semáforo epidemiológico color rojo, pero se eliminan las restricciones de horarios para establecimientos.
El secretario de Salud, Eduardo Fernández Herrera, explicó que se están evaluando los indicadores a fin de adoptar nuevas modalidades y aseguró que el consejo validó el impacto positivo que ha generado el semáforo rojo y la reducción de movilidad sobre el nivel de contagio.
El titular de la Secretaría de Salud indicó que se acordó también intercambiar información con el gobierno federal, así como con los sectores involucrados, con el propósito de comprometerlos con protocolos sanitarios que permitan dar un respiro a algunas actividades económicas que han sufrido serias afectaciones, sin que se ponga riesgo la salud de las y los chihuahuenses.
Por su parte, el gobernador de Chihuahua declaró que las medidas establecidas durante estas dos semanas han sido exitosas para bajar el nivel de contagios y decesos en el estado, por lo cual, ahora se busca flexibilizar la reapertura de negocios evitando caer en números altos.
El mandatario estatal señaló que la discusión del Consejo Estatal de Salud continúa en torno de ver la manera de mantener los resultados obtenidos con la restricción; “en Chihuahua hemos planteado que podemos ser más restrictivos que la Federación, pero no más permisivos”.
“A lo largo de estos meses se ha desestimado o descalificado, en el peor de los casos, medidas que, de haberse puesto en marcha desde el principio, nos hubieran generado otros resultados”, señaló Corral Jurado.
El gobernador afirmó que el regreso al semáforo rojo se realizó de manera inmediata al observar el repunte de contagios, “buscamos detener ese nivel, que de 950 contagios llegó hasta más de 4 mil 500 en una semana epidemiológica”.
De acuerdo con el equipo de la Universidad Autónoma de Chihuahua (UACH), tras las medidas de restricción, se lograron disminuir 10 indicadores que se tienen para la vigilancia de la pandemia.
Corral reiteró que el principal propósito de las medidas restrictivas es bajar el nivel de ocupación hospitalaria hasta en 50%, por lo cual se analizan las medidas a tomar sin dejar de lado, dijo, la reactivación económica a partir de la reapertura de los diferentes sectores de manera organizada y con un protocolo sanitario distinto.
Reiteró que el consejo estatal mantiene el intercambio de información estadística con el gobierno federal.