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Tijuana.— Un grupo de mujeres bloquearon parcialmente la garita San Ysidro y El Chaparral, las puertas internacionales de acceso y salida entre México y Estados Unidos, para protestar contra los feminicidios y exigir justicia.
Colectivos, pero también familias víctimas de la violencia, se sumaron a la movilización que arrancó desde el centro de la ciudad con dirección a ambos puertos.
La familia de Ana Gissel fue una de las que se sumaron al reclamo. La joven está desaparecida desde el 3 de diciembre pasado.
La madre de Ana Gissel platicó que “la ultima llamada fue de auxilio, alguien la había golpeado, eso es lo último que escuché de mi hija y aún estoy esperando ya no sólo justicia, sino que este violencia no crezca más y nos arranque a nuestras hijas”.
Con la presencia de observadores de derechos humanos las mujeres, unas con rostros cubiertos y otras con las fotografías de las desaparecidas, dieron el primer paso de la marcha rumbo a la garita San Ysidro, en Tijuana. Ahí se concentraron y fueron recibidas por cientos de policías municipales, federales y de la Guardia Nacional, quienes les impedían el paso hasta que les permitieron llegar a los carriles de espera para cruzar a Estados Unidos.
En ese sitio se lanzaron gritos al unísono de “Arturo Cruz (el alcalde de Tijuana) escucha, mujeres en la lucha”, seguidos de “Somos malas, podemos ser peores”, luego de surgir fricción con los cuerpos policiacos que impidieron que continuaran con la movilización, optaron por trasladarse a El Chaparral, la puerta de entrada a México.