En Guerrero, docentes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de Educación en el estado (CETEG) intentaron derribar la puerta principal del Palacio de Gobierno.
Por la mañana, los profesores marcharon desde el sur de la ciudad hasta el Palacio, donde quitaron las vallas que resguardaban el lugar. Ahí intentaron fallidamente romper los candados.
Los maestros finalmente hicieron un mitin y después se retiraron.
En tanto, en Oaxaca, la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) mantuvo el paro laboral de 72 horas.
Eloy López Hernández, secretario general, emplazó al gobernador de Oaxaca a resolver sus demandas antes del 15 de mayo, de lo contrario, advirtió con empezar una huelga nacional indefinida a partir de esa fecha.
Asimismo, en Chiapas, al concluir el miércoles el tercer día de paro, docentes adheridos a la CNTE protestaron y bloquearon carreteras en diferentes regiones. Los bloqueos y protestas se extendieron en 19 municipios. Los profesores ocuparon la caseta de peaje de la carretera de cuota Tuxtla Gutiérrez-San Cristóbal de las Casas, donde “botearon” y “volantearon” para informar sobre su movimiento.
Tras hacer presencia en distintas vías de comunicación del estado, la Coordinadora pidió la instalación de una mesa de diálogo con autoridades del gobierno federal. En lo local, exigen entre otras cosas, plazas automáticas para los egresados de las generaciones 2015, 2016 y 2017 de las escuelas normales del estado.
Se amparan. En Coahuila, cientos de profesores, dependientes del estado, pensionados y jubilados protestaron en contra de algunos actos “inconstitucionales”, como condicionarles el servicio médico y cobrarles “pago voluntarios” por acceso a la salud.
A la fecha, los docentes han interpuesto alrededor de 5 mil amparos en contra de la reforma a la Ley del Servicio Médico de los Trabajadores del Estado, aprobada en diciembre pasado por el Congreso estatal.
