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Oaxaca de Juárez.— Luego de que el domingo concluyó el periodo de aislamiento voluntario al que convocó el gobernador Alejandro Murat, como una forma de mitigar los contagios del nuevo coronavirus en los Valles Centrales de Oaxaca —epicentro de la pandemia en el estado—, el mandatario anunció tres medidas a seguir tras este confinamiento, entre ellas que se pospone la Guelaguetza, considerada “la máxima fiesta de los oaxaqueños”.
Tras agradecer la cooperación de todos por “elegir salvar vidas”, informó que como el estado de Oaxaca continúa en semáforo rojo, es decir con el máximo riesgo de contagio de Covid-19, siguen restringidas las actividades no esenciales, y sólo deben realizarse aquellas relacionadas con la industria, la construcción y la minería.
Asimismo, como segunda medida anunció que instruyó a los titulares de Economía y Turismo del gobierno estatal para que junto con los sectores comercial, hotelero y gastronómico “puedan implantar los protocolos y en las próximas semanas empiece una apertura gradual”.
Finalmente, Murat anunció que por la situación que vive Oaxaca, su administración ha decidido suspender la Guelaguetza, fiesta étnica en la que las diferentes comunidades originarias de la entidad presentan sus tradiciones a los visitantes, y la cual es la principal fuente de ingresos económicos para el sector turístico.
“He decidido que se posponga la Guelaguetza, y estaremos evaluando llevar a cabo actividades de esa celebración en el mes de diciembre, si el semáforo permite eventos masivos”, anunció.
El 4 de mayo pasado, EL UNIVERSAL adelantó que el gobernador consideraba que no existían condiciones para que este evento se llevara a cabo en las dos últimas semanas de julio, como cada año, y pese a su importancia económica —pues en 2019 dejó una derrama de 423 millones de pesos gracias a la visita de 121 mil personas—, se contemplaría su realización sólo si su gobierno pudiera garantizar la vida y la salud de las personas.
“Un elemento fundamental para que pudiera haber eventos masivos sería tener la capacidad para hacer exámenes en tiempo real para ver que no haya personas que puedan contagiar”, comentó en entrevista.
El gobernador finalizó su mensaje asegurando que confía en que con disciplina y siguiendo las medidas de mitigación, Oaxaca tomará el rumbo que esperan las familias respecto a la pandemia.