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Tlaxcala.- Pacientes enfermos por insuficiencia renal se manifestaron en Tlaxcala para pedir pacíficamente al Gobierno local que reactive el programa de trasplantes con donador cadavérico, el cual fue suspendido desde hace casi dos años por falta de recursos para su financiamiento en el Hospital IMSS-Bienestar de Tzompantepec.
Con pancartas en mano, a través de las cuales también solicitaron una segunda oportunidad de vida, expresaron que al reactivarse el programa ellos tendrán acceso a un trasplante de riñón de manera más ágil y con ello mejorarán su calidad de vida.
“Nosotros queremos que se reactive el programa porque, al reactivarse el programa, no solamente seremos beneficiados los que estamos en una lista de espera, también se reactivaría el programa para que sigan los protocolos y pueda entrar al programa más gente”, explicó una mujer con insuficiencia renal, quien participó en la protesta pacífica.
Precisó que se trata del programa de trasplantes renales a través de donador cadavérico que implementó el Hospital Regional de Tzompantepec, y el cual fue suspendido prácticamente desde que el nosocomio se sumó al IMSS-Bienestar y desde el inicio de la administración de la gobernadora, Lorena Cuéllar.
“El programa de trasplantes de donador vivo está activo; sin embargo, el de donador cadavérico no está activo en este momento, ya lleva casi dos años, por falta de recursos”, apuntó.
En consecuencia, lamentó que cuando surge algún donador sus órganos son enviados a otras entidades porque el programa no está activo en Tlaxcala, pese a que el hospital de la red IMSS-Bienestar cuenta con la licencia para realizar ese procedimiento médico quirúrgico.
Los pacientes aseguraron que se han acercado a la Secretaría de Salud local (Sesa) para exponer la problemática; sin embargo, la respuesta que reciben es que “No hay recursos”.
“Hay compañeros que ya han fallecido esperando porque es una enfermedad que no perdona, y el trasplante es nuestra única oportunidad de vida”, apuntó otro paciente.
La lista de espera de pacientes con insuficiencia renal que ya han cumplido con el protocolo para un trasplante en el Hospital Regional de Tzompantepec IMSS-Bienestar, está encabezada por 10 personas, pero es más extensa.
De no activarse el programa, advirtieron que perderán todo el proceso clínico al que se han sometido para ser candidatos a un trasplante, y que tiene un costo superior a los 100 mil pesos.
“Un solo estudio para iniciar el protocolo cuesta alrededor de 100 mil pesos, es un gasto imposible para la mayoría de los pacientes, sobre todo para los que somos de escasos recursos”, subrayó uno de los pacientes.
Los enfermos renales recordaron que durante la administración del exgobernador Marco Antonio Mena Rodríguez existió un convenio que servía para reducir significativamente los costos de los exámenes y protocolos previos a un trasplante, mismo que ya tampoco existe.
Además, afirmaron que en ese entonces el número de trasplantes era mayor; incluso, en el último mes que operó el programa de donaciones cadavéricas fueron trasplantadas unas siete personas, pero desde hace casi dos años los enfermos renales siguen en espera porque el programa fue suspendido.
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