Nos platican que los habitantes de la zona metropolitana de Monterrey, que la pasaron bastante difícil por los cortes de agua entre marzo y septiembre, ya se habían resignado a que este lunes se iban a quedar de nuevo sin el preciado líquido, debido a trabajos de mantenimiento en las redes eléctricas que hacen funcionar los equipos de bombeo de la presa San Roque y el río La Silla.
Sin embargo, nos dicen que esta vez corrieron con suerte, porque a última hora, por las condiciones de frío y llovizna que prevalecen en la región, se pospuso la medida hasta nuevo aviso. Pero de igual modo, el corte vendrá próximamente porque, como dicen, más vale prevenir que lamentar, como cuando en plena crisis hídrica un mini apagón provocó una macro fuga que dejó a la ciudad sin el suministro del acueducto de la presa El Cuchillo durante cinco días. Al parecer, aprendieron bien la lección.