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Pachuca, Hidalgo.— Diputadas del Congreso local de Hidalgo tomaron la tribuna previo a la conmemoración del 8 de marzo para exigir justicia para las víctimas de feminicidio, un freno a la violencia de género y medidas para combatir la desigualdad que persiste en el estado y en el país.
En su participación, la diputada Mónica Reyes Martínez señaló que cada día nueve mujeres son asesinadas en México por el hecho de ser mujeres. Destacó que en 2024 se cometieron 773 feminicidios, mientras que en Hidalgo, en lo que va del año, se han registrado 15, lo que evidencia una crisis de violencia de género.
Asimismo, afirmó que en América Latina y el Caribe, 4,473 mujeres fueron víctimas de feminicidio en 2021, lo que equivale a un promedio de dos asesinatos por día.
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Las legisladoras enfatizaron que el feminismo no es una moda, un capricho ni un simple discurso, sino una necesidad frente a un sistema que vulnera los derechos y la vida de las mujeres.
Por su parte, la diputada María Guadalupe Cruz Montaño destacó que el feminicidio es el último eslabón de una cadena de violencia que comienza con la deshumanización, el acoso callejero, la violencia doméstica, el abuso sexual, la explotación laboral y la negación de derechos.
Resaltó que, según cifras oficiales, el 76% de las mujeres en México han sufrido acoso en espacios públicos al menos una vez en su vida.
“Nos siguen gritando, nos siguen siguiendo, nos siguen tocando sin consentimiento. ¿Y qué pasa cuando denunciamos? Nos cuestionan, nos culpabilizan, nos revictimizan. El mensaje es claro: nos quieren calladas, nos quieren sumisas, nos quieren con miedo. Pero no lo lograrán”, expresaron.
La diputada Karla Perales, presidenta de la Comisión de la Niñez, subrayó que la violencia que enfrentan las mujeres en el ámbito laboral y político es un hecho innegable. “Ser mujer en el poder público significa estar bajo el escrutinio constante, el acoso digital y las campañas de desprestigio”, aseveró.
Por su parte, la diputada del PT, Kitty Larragoiti, lamentó la estigmatización de las mujeres que alzan la voz. “Nos llaman violentas, pero la verdadera violencia es vivir con miedo. Violencia es tener que avisar que llegamos a casa. Violencia es percibir un salario menor que el de los hombres por el mismo trabajo”, señaló.
Mientras tanto, la legisladora panista Claudia Lilia Luna exigió que no se revictimice a las mujeres y que se garantice seguridad en todos los espacios. “No más simulaciones ni promesas vacías”, sentenció.
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Las diputadas coincidieron en que el 8 de marzo es una jornada para recordar que aún falta mucho por hacer en la lucha por los derechos de las mujeres.
“Nos quieren fuera y silenciadas, pero no nos iremos y mucho menos nos callaremos. Nosotras no somos violentas, nosotras somos la resistencia”, concluyeron.
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