Monterrey.— El gobernador Samuel García Sepúlveda pidió a los industriales ayudar a Nuevo León a salir de la crisis del agua, durante la presentación del Plan Maestro del Agua para empresarios y representantes de la sociedad estatal.
El mandatario estatal consideró que “la industria tiene que aportar y ayudarle a Nuevo León a salir de esta crisis”, y aseguró que su gobierno no está cruzado de brazos ni espera que las lluvias solucionen el problema. Por el contrario, dijo, se realizan diversas acciones para salir de la crisis, aun cuando se estima que la próxima semana lleguen las lluvias al estado.
“Lo importante que ustedes sepan es que nosotros estamos trabajando partiendo de que no va a llover, porque no podemos arriesgar a la naturaleza, pero obviamente, si llueve, lo que pusimos del mes de agosto se puede recorrer a una fecha anterior”.
Detalló que entre los acciones a largo plazo, se realizará la construcción del acueducto El Cuchillo II, proyecto que se encontraba en el abandono por las anteriores administraciones estatales y que traería cinco metros cúbicos más para los ciudadanos.
El gobernador destacó que del domingo a la fecha se han cateado 21 ranchos que presentan irregularidades, como pozos ilegales o con permiso, pero que sacan el doble o triple de lo permitido; desvíos de cauces de ríos y arroyos; perforaciones humanas en ductos como el de El Cuchillo, así como represas artificiales que desvían agua de ríos como el Potosí, Hualahuises, Blanquillo, Camacho, Ramos y Cola de Caballo.
“Mil litros [recuperados] que hoy se van a reflejar en la red y por eso vamos a poder garantizar las clases para que tenga el turno matutino toda el agua necesaria para los niños y con tinacos el turno vespertino”, expresó.
García Sepúlveda propuso a la Fiscalía General de Justicia de la entidad no esperar a que llegue la carpeta y actuar de oficio, al ser un tema mediático y público.
Suspenden rastro
El gobernador Samuel García Sepúlveda ordenó la suspensión del rastro municipal de la ciudad, al detectar, durante un operativo de inspección, que se estaban robando el agua de la ciudad desde hace 20 años.
El mandatario se disculpó por llegar con retraso al evento con los empresarios y argumentó que venía del rastro municipal, que “fue suspendido porque en sus instalaciones se tienen que matar diariamente 600 reses y gastar mil litros de agua en cada una de ellas; nada más multipliquen. Se gastarían 600 mil litros por día”.
“No tienen ni idea del negociazo, la corrupción y la cantidad de agua que nos robaron por décadas en este rastro. La cantidad de agua gigante, bestial, que consume con pozos ilegales [tres], para darles de tomar a miles de reses y luego cuando las matan limpiar el sangrerío, el canal, el rastro y todos los días sacando agua, litros y litros que, en lugar de llegar a tu casa, se usan para el bolsillo, para el negocio de una empresa”, detalló el mandatario.
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