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Monterrey.— Ante las condiciones de hacinamiento que prevalecían en las instalaciones del Instituto Nacional de Migración (INM) y por el deceso de un salvadoreño, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) inició dos expedientes de queja; en tanto, autoridades federales comenzaron el traslado de extranjeros a otras instalaciones.
La Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) previamente señaló que el edificio del INM, ubicado en el sur de Monterrey, no reunía las condiciones adecuadas, debido a que son oficinas administrativas y no una estación migratoria.
La CNDH informó que en relación con el hacinamiento, el pasado miércoles un grupo de aproximadamente ocho extranjeros —que había llegado horas antes al lugar— empezó a gritar y a aventar las colchonetas, lo que ocasionó que las demás personas alojadas se alteraran y pretendieran salir de las instalaciones.
Por ello, la mayoría de los migrantes fueron trasladados a la Expo Guadalupe, por ser un sitio más amplio y donde se determinará su situación jurídica.
Hasta estas instalaciones llegaron 451 migrantes custodiados por personal del INM y de Fuerza Civil, y fueron atendidos por elementos de la Secretaría de Salud estatal y Protección Civil, para descartar problemas médicos.
A los extranjeros se les detectaron, principalmente, infecciones estomacales, gripes y otros problemas menores; sólo un niño de cinco años requirió ser trasladado en una ambulancia al Hospital Materno Infantil de Guadalupe para atender un posible caso de bronquitis.
Las instalaciones de la Expo Guadalupe permanecen custodiadas por seis patrullas de Fuerza Civil y se colocaron cintas delimitadoras para impedir que los medios de comunicación tomaran imágenes o dialogaran con los extranjeros.
Despresurizan nueva sede. Al mediodía de ayer, tres autobuses con 166 migrantes salieron desde la Expo Guadalupe con destino a la estación migratoria de Acayucan, Veracruz.
De acuerdo con autoridades migratorias, de los 166 centroamericanos trasladados, 58 tienen procedimiento resuelto y contarán con retorno asistido a su país de origen, mientras que los otros 108 aún tienen pendiente su situación legal; en tanto que en la nueva sede aún se quedaron 285 extranjeros.
