Ciudad Juárez.— A pesar de que esta localidad es considerada estratégica en materia económica por su cercanía con El Paso, Texas, el gobierno federal ha rezagado la vacunación en Ciudad Juárez y la excluyó de la aplicación del biológico enviado por Estados Unidos para inmunizar en la frontera.
Aun y cuando el presidente de la República Andrés Manuel López Obrador calificó el reclamo de vacunas para la ciudad como un acto de politiquería, desde que inició el proceso de vacunación en el país, Ciudad Juárez ha sido el último municipio del estado en el que se aplica el biológico en cada rango de edad, ello, a pesar de tener el mayor número de habitantes.
Ayer, la Secretaría del Bienestar inició la aplicación de 20 mil dosis en municipios fronterizos: se consideró a Ascensión, Coyame del Sotol, Janos, Miguel Benavides y Ojinaga, no así a Ciudad Juárez, municipio que además ha registrado un importante número de decesos por Covid-19.
El “otro” lote
A mediados de junio, el gobierno federal anunció también la llegada de más de 1.3 millones de dosis del biológico Johnson & Johnson procedentes de Estados Unidos con las que, se informó, se vacunaría sólo a los habitantes de ciudades fronterizas, a fin de poder reabrir los cruces internacionales en beneficio de ambos países.
Sin embargo, a pesar de que el subsecretario Hugo López-Gatell señaló que estas vacunas se aplicarían en 39 municipios de los seis estados fronterizos, días después se dio a conocer que se había decidido aplicar estas dosis en Baja California para la inmunización universal de esa entidad.
Las autoridades locales de la Secretaría del Bienestar señalaron que esperan que Estados Unidos ofrezca un nuevo lote de vacunas para llegar al resto de los municipios de la frontera; sin embargo, no se ha dado a conocer la fecha tentativa para que eso pueda ocurrir.
Según información extraoficial, el biológico podría tardar en llegar, pues el gobierno de Estados Unidos exige que la vacuna que sea aplicada en las ciudades fronterizas corresponda a Pfizer o Johnson & Johnson, ya que de lo contrario, el país vecino no reabrirá su frontera con México.
De resultar cierta esta exigencia del gobierno estadounidense, miles de maestros y personal médico que fue inmunizado con otros biológicos, como Cansino, resultaría afectado para su ingreso a Estados Unidos.