La Fiscalía General de Puebla mantiene abierta una línea de investigación sobre posible trata de personas en el caso de la estudiante universitaria Mara Fernanda, reportada como desaparecida desde el viernes pasado.
El titular de la dependencia, Víctor Carrancá Bourget, admitió que es una línea de investigación de otras que se siguen para dar con el paradero de la estudiante.
Aseguró que existen pruebas suficientes de que la joven subió a la unidad de Cabify y que en el traslado a su domicilio algo sucedió con ella, pues no llegó a su destino final.
Por otra parte, este jueves un juez de control calificó como legal la detención del chofer de la empresa Cabify Ricardo “N”, de 21 años, acusado de la privación ilegal de la libertad de la joven universitaria.
Durante la audiencia, el impartidor de justicia determinó como legal el arresto que efectuaron elementos de la Fiscalía General del Estado, de manera conjunta con agentes de Tlaxcala.
El Ministerio Público explicó que el chofer, el último que vio a la estudiante de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), fue detenido a las 13:10 horas del pasado lunes cuando circulaba a bordo de la unidad Chevrolet Sonic, con la cual brindaba servicio a Cabify.
El representante social detalló que la orden de detención fue liberada ese mismo día, luego de que se confirmó que la geolocalización del celular de Ricardo coincidía con la del teléfono de Mara Fernanda, situándolos en una localidad del estado de Tlaxcala.
El Ministerio Público solicitó la formulación de imputación; sin embargo, ésta no logró realizarse debido a que los abogados defensores del acusado fueron relevados del cargo por el juez al detectar que carecían de los conocimientos del Nuevo Sistema de Justicia Penal.
Ante ello, se decretó un receso de 10 horas para que el chofer contrate un abogado o acepte la defensoría de oficio con el fin de que cuente con un proceso eficiente y que garantice sus derechos.
En la audiencia estuvo presente Gabriela Viveros, madre de Mara, quien exigió a las autoridades no dejar en libertad a Ricardo hasta que se esclarezca el caso.
Las primeras indagatorias señalan que Mara Fernanda, de 18 años y originaria de Veracruz, estuvo conviviendo con amigos en un bar de Cholula el jueves en la noche y la madrugada del viernes. Al salir de lugar solicitó un auto de la empresa Cabify para que la llevara a su fraccionamiento, en San Andrés Cholula, zona conurbada a la capital poblana.
Sin embargo, las cámaras de videovigilancia, según los familiares, detectaron la llegada del auto al fraccionamiento donde vive la joven, a un costado de la Recta a Cholula, pero ella no descendió y después la unidad se retiró.