Mapastepec.— Al menos 17 menores que viajan en la caravana migrante han presentado síntomas de tos, fiebre y diarrea, pero personal de hospitales de salud del estado y federal les han negado la atención por miedo a que pueda ser Covid-19.
El pasado domingo, madres migrantes llevaron a sus hijos al Hospital Rural “B” número 1, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), ya que presentaban fiebre, tos y diarrea, pero el director, David Huitrón Vertiz, se habría negado a brindarles atención médica debido a que eran sospechosos de Covid-19, denunciaron las mujeres.
“Al niño mío no lo quisieron atender ni a otros más porque estaban enfermos de fiebre, tos y diarrea”, explicó la madre.
“Dijo el doctor que veníamos enfermos de Covid y que deberían ponernos en cuarentena, también que se haga cerco sanitario o que regresáramos a Tapachula, ya que representábamos un peligro para el pueblo”.
Ana Leticia indicó que sus hijos se enfermaron al mojarse por las constantes lluvias que se han presentado durante la caminata, que suma ya 10 días.
La especialista en diabetes Talía Vargas López, de Cuba, quien viaja en la caravana migrante, dijo que pidieron al médico que les aplicara pruebas de Covid-19 y dengue para confirmar los diagnósticos, pero el doctor se negó.
“Él dijo que nosotros estamos propagando epidemia a la comunidad; ellos sólo quieren hacer un cerco sanitario a su favor”, dijo la doctora.
Ante la negativa de la atención médica en la clínica rural de Mapastepec, los dirigentes de la caravana denominada “Marcha por la Paz, Justicia y Libertad del Pueblo Migrante”, Irineo Mújica y Luis Rey García Villagrán, se llevaron a 17 niños al hospital de Pijijiapán, ubicado a unos 45 kilómetros de esta cabecera municipal, pero tampoco los atendieron debido a que les pidieron pruebas de Covid-19 con resultados negativos.
Posteriormente, el Instituto Nacional de Migración (INM) emitió un comunicado en el que informa que se han dado seis casos de dengue entre las personas que viajan en la caravana, de los cuales cinco son niños y uno se encuentra grave con dengue hemorrágico, por lo cual está internado en el Hospital Rural de Mapastepec.
Caravana mantiene su camino
La madrugada del lunes, la caravana migrante que partió de Tapachula hace 10 días, y que ha recorrido más de 100 kilómetros, continuó su camino hacia la Ciudad de México, a pesar de que varios menores de edad padecen tos, gripa y diarrea.
El contingente avanzó ocho kilómetros hasta la comunidad de Nuevo Valdivia, donde las autoridades ejidales y los pobladores se organizaron para brindarles comida caliente, mientras las autoridades ejidales les permitieron descansar en el domo techado y les abrieron las puertas de la iglesia del lugar para que pudieran orar.
Leer también: Irma huyó de Honduras por Maras pero la secuestraron en México