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En una sencilla e íntima ceremonia, familiares y amigos le dieron el último adiós a la profesora jubilada y taxista veracruzana, Irma Hernández Cruz, privada de la libertad por un grupo armado, quienes la grabaron sometida y luego la asesinaron.
Con flores y una profunda tristeza, fue despedida y llevada a su última morada, el panteón del ejido Pueblo Nuevo del municipio de Álamo Temapache, en el norte de Veracruz, donde la maestra trabajaba en un taxi y fue víctima de un grupo delincuencial que intentó extorsionarla.
Su hija –según medios locales- solo susurró que su madre era buena y no merecía morir de esa forma: secuestrada por un comando, exhibida de rodillas y amarrada de las manos en un video, obligada a enviar una amenaza al resto de los taxistas de la zona.
El estupor e indignación de una sociedad no cesa; una sociedad que durante más de dos décadas lleva sufriendo los estertores de la violencia y que con el asesinato de Irma se han volcado a las redes sociales para manifestar su pesar.
Y es ahí, en ese espacio virtual, donde docenas de usuarios ponen en duda las últimas tres detenciones (dos hombres y una mujer) de presuntos implicados en el crimen de la profesora jubilada.
Primero se reportó la aprehensión de Víctor “N”, alias “El Cholo” o “Moyo", y José “N”, “El Gastón” o “Águila”, durante un operativo en el municipio de Cerro Azul, contiguo a Álamo Temapache.
A los dos se les aseguraron, según la Fiscalía General del Estado, vehículos, armas de fuego, cartuchos balísticos, un arma blanca, teléfonos celulares, dinero en efectivo y marihuana.
Horas después, se reportó la aprehensión de una mujer identificada como Jeana Paola “N”, quien presuntamente pertenece a la misma banda delictiva y a quien se le aseguró “una libreta con lista de cobro de piso”, así como marihuana, cartuchos balísticos y una camioneta con placas de Tamaulipas.
Muchos se preguntan dónde están los doce sujetos fuertemente armados que custodiaban y sometían a la profesora en el video difundido una y otra vez por todos los espacios virtuales.
Al ser privada de la libertad el viernes 18 de julio por un grupo armado en el norte de Veracruz, familiares y amigos se movilizaron para intentar rescatarla; sin embargo horas después, el crimen organizado difundió un video.
La profesora de 62 años se encontraba sometida, arrodillada y atada de manos, rodeada por hombres armados; obligada a leer un mensaje donde pedía a los taxistas de esa región pagar la cuota a la delincuencia o de lo contrario sufrirían la misma suerte.
Las autoridades ministeriales confirmaron el jueves pasado que fue localizado su cadáver en la comunidad de Tepetzintlilla del propio municipio de Álamo.
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