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Tuxtla Gutiérrez.- Al cumplirse este lunes un mes de la retención de 19 empleados de diferentes empresas privadas en el municipio de Altamirano , por presuntos simpatizantes del exalcalde Roberto Pinto Kánter (PVEM) , sus familiares marcharon y exigieron que el gobierno acuerde con los captores y libere a sus consanguíneos.
Con mantas y pancartas alusivas, las madres, esposas y hermanas de los trabajadores que se desempeñan como conductores y ayudantes de camiones de reparto de productos básicos y materiales de construcción marcharon del inmueble conocido como La Cabeza Maya, en la zona poniente, a la sede del gobierno estatal.
Los reclamantes aseguraron que los retenidos, que llegaron de Comitán de Domínguez, Ocosingo y Tuxtla Gutiérrez, son ajenos al conflicto político que vive Altamirano por la disputa del ayuntamiento, encabezado por un concejo municipal a cargo de María García.
"Esto es cuestión política, lo cierto es que nada tienen que ver esos muchachos, ahí está mi ahijado, tiene 20 años de edad; el gobierno no ha hecho nada; los padres quieren la liberación, ahora les dan sólo una comida y los tienen en el bosque sufriendo frío", dijo Eliodora Pérez Flores.
Martha de Jesús Coyi Pol denunció que el padre de sus hijos, Elías del Carmen Moreno Velazquez , también está entre los retenidos.
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"Lo que queremos es que se haga justicia, no es suplica al gobierno es exigencia; no es justo que estemos pagando todos, ellos son trabajadores"
Otra mujer, cuyo esposo trabaja en una de las empresas, contó que viajó con sus hijos de Ocosingo, en la selva de Chiapas, durante la madrugada para protestar. "Llegué de Ocosingo porque mi esposo fue secuestrado, tiene un mes que no aparece, no habla, no sabemos nada de él, no sabemos si duerme bien, tampoco si lo maltratan.
"Venimos al Palacio de Gobierno para pedir apoyo porque en sus manos está (la solución) para que lo suelten; queremos que hagan justicia Ya nos preocupamos y estamos viendo de qué manera salir a buscarlos", expresó.
La mujer aseguró que piden justicia porque sus familiares no son culpables de nada. “Sus captores exigen que corran al concejo de Altamirano, pero nosotros no podemos hacer nada, no quieren dialogar, sino que lo haga el gobierno”, sostuvo.
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Según una videograbación difundida la semana pasada, los 19 conductores de camiones y sus ayudantes sólo reciben una comida al día y fueron trasladados a un punto boscoso. Los familiares dijeron durante la protesta que no saben nada de los retenidos, porque los teléfonos celulares mandan a buzón cuando les llaman.
Además de los trabajadores de empresas privadas, el supuesto grupo de Pinto Kánter retuvo el 29 de diciembre a 27 ejidatarios identificados con el Concejo Municipal encabezado por María García, a quienes concentran en el poblado La Candelaria.
Versiones apuntan que los retenidos pasan del medio centenar, entre empleados y lugareños, aunado a una decena de camiones distribuidores de abarrotes y otros productos básicos.
Los captores demandan la desaparición del concejo municipal designado por la Legislatura local a finales de octubre, posterior a la licencia de la alcaldesa y esposa de Pinto Kánter, Gabriela Roque Tipacamú, también del Partido Verde, y de su cabildo.
El concejo municipal fue nombrado para la liberación de Pinto Kánter, quien fue retenido por inconformes a finales de septiembre, a dos días de concluir su mandato. El exalcalde iba a ser relevado por su cónyuge; entre ambos gobernaron Altamirano durante tres administraciones consecutivas.
afcl/acmr
