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Zacatecas.- Decenas de adultos mayores permanecieron hasta tres horas bajo las inclemencias del frío en espera de que les abrieran las oficinas del Banco del Bienestar, ubicado en el municipio de Guadalupe, para poder cobrar su pensión de este año.
Cabe mencionar que este lunes, a las 6:00 horas, la temperatura en la zona metropolitana de los municipios de Zacatecas y Guadalupe fue de 5 grados centígrados con sensación térmica de 2 grados y con una velocidad del viento de 17 kilómetros por hora.
Varios adultos mayores entrevistados por EL UNIVERSAL que estaban en la larga fila dijeron que llegaron desde poco antes de las 6 de la mañana, pero su sorpresa fue que cambiaron el horario de apertura de las oficinas del banco, ya que antes abrían a las 8:00 horas, pero ahora fue hasta las 9 de la mañana.
Coincidieron que en esta vez fue más complicada la espera, ya que en otras ocasiones siempre se colocaba afuera del banco un toldo con sillas para que los adultos mayores pudieran estar sentados, incluso, antes de las 8 de la mañana les abrían las puertas del banco para que pasaran algunos y ahí pudieran esperar a que abrieran las ventanillas.
Mencionaron que algunos llevan sillas plegables, pero muchos no, incluso, algunos están enfermos o usan muletas, por ello había molestia, porque no se les avisó que el horario sería más tarde y ya no se les otorgaron las mismas condiciones para resguardarse del frío.
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“Mire, yo sufro de mis articulaciones y con el frío me duelen los huesos, entonces la verdad sí estaría bien que fueran más conscientes en el gobierno, porque nosotros ya estamos viejos y no aguantamos tantos los climas ni podemos estar tanto tiempo parados”, refiere doña María.
Doña Julia menciona que en su caso está obligada a ir personalmente a recibir la pensión en el Banco del Bienestar porque desde hace más de un año que no le han entregado su nueva tarjeta y no puede ir hacer los retiros a los cajeros.
“Mire, gracias a Dios hoy no amaneció con los ventarrones y el frío tan congelante de ayer que estuvo a bajo cero, pero hoy vemos mucha desorganización, porque hay mucha gente que requiere de estar sentada y, yo mejor le presté mi banquito a otra persona que lo necesita más que yo”, dice
Don Manuel tiene que apoyarse de sus muletas porque no tiene uno de sus pies, mientras que doña Tere dice que ojalá las autoridades que deben avisar los cambios de horarios y que pongan más condiciones para que los adultos mayores no le sean tan pesado aguantar la espera.
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