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Valeria Marín ha acompañado a su pareja, Julian Gil, por momentos buenos y malos durante casi cinco años. Esto incluye el estado emocional del actor en un tema sensible: que desde 2020 no puede ver a su hijo Matías, tras perder la patria potestad.
Tras una larga disputa con Marjorie de Sousa, Gil decidió renunciar a ver a su hijo, por el bienestar emocional del menor; pero este hecho, confesó su pareja actual, ha provocado en el argentino un quiebre emocional que ella considera es puramente sufrimiento.
“Lamentablemente, llegamos a un punto de desgaste emocional. Es muy difícil ver a alguien sufrir, especialmente por algo así”, confesó la también conductora deportiva.
“Hay un dicho: ‘Tiempo al tiempo’, aunque no sabemos cuándo llegará ese momento (que se reencuentre con su hijo). Estoy segura de que, eventualmente, Julián será recompensado por ser el gran padre que es. De mi parte, siempre tendrá mi apoyo”, remarcó.
Aclaró que Julián ha agotado todos los recursos para lograr reencontrarse con su hijo nuevamente, incluso está decidido a aceptar cualquier condición que ponga su expareja para verlo.
“Siempre ha estado ahí, dispuesto a ser un buen papá, pero, lamentablemente, no depende de él. Entiendo que el tiempo puede sanar o resolver muchas cosas, pero me parece crucial cuestionar las decisiones que llevaron a esta situación. Aunque el tiempo pase, ninguna razón justificará este daño", destacó.
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Entrevistada previo al concierto del cantante Mane de a Parra celebrado la noche del miércoles, Valeria lamentó que el amor de padre no sea suficiente para que la relación con Marjorie mejore, algo que espera cambie por el bien de su pareja.
"No, no se perdonan (Julian y su expareja). Él está perdiendo los primeros años de vida de Mati, y es probable que, si esta situación no avanza, siga perdiéndose momentos importantes. Esto no debería pasar, pero fue una decisión tomada por la otra parte. Aunque esa decisión sea respetable, no es justificable”, añadió.
Remarcó que Julián ha hecho todo lo posible en términos legales, sin dejar de ser respetuoso con la idea de llegar a acuerdos, e incluso ha utilizado los medios de comunicación para expresar su deseo de estar con su hijo. “Sin embargo, si del otro lado no hay disposición, empatía o interés, Julián ya no puede hacer más”, dijo.
Respecto a la polémica desatada luego que Marjorie compartiera en redes sociales una fotografía de Matías con el cantante de tumbados Peso Pluma, sólo aclaró que espera lo mejor, que el pequeño sea feliz.
"Nosotros lo percibimos igual que ustedes, a través de las redes sociales y de lo que se publica. Sabemos que Mati está bien y, como cualquier niño, merece crecer feliz”.
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