En trece capítulos, la serie de Luis Miguel desató varias polémicas que causaron eco en redes sociales y medios de comunicación.
Aquí recordamos algunas de las polémicas originadas a raíz de la serie de Netflix:
-¿Dónde está Marcela Basteri?
Gracias a la serie pudimos ver el vínculo tan estrecho que Luis Miguel tenía con su madre, pero que se rompió cuando ella desapareció en 1986. Aunque surgieron algunas pistas del paradero de Marcela, al final de la primera temporada quedó abierta la interrogante de dónde se encuentra.
Diversas teorías han surgido al respecto de lo que pasó con Marcela, pero en la serie sólo se habló de una posible estancia en un siquiátrico, que al final resultó no ser así, y del papel de Luisito Rey en la desaparición.
-La imagen de Luisito Rey
El padre de Luis Miguel se convirtió en el gran villano luego de ver las cosas que hizo a su hijo, con el fin de levantar su carrera y después consolidarla. Mentiras, traición y maltratos marcaron la relación entre Luis Miguel y su padre. Una vez que “El Sol” fue mayor de edad, decidió romper el vínculo laboral con él y finalmente lo sacó de su vida.
- El tema de Stephanie Salas
Una de las críticas más fuertes que se llevó la serie fue la manera en que se retrató la relación de Luis Miguel con Stephanie Salas, la madre de su hija Michelle. En un episodio de la serie se mostró como si el cantante hubiera estado con ella por despecho, luego de romper con Mariana Yazbek.
-Roberto Palazuelos
Uno de los más “afectados” tras la serie fue Roberto Palazuelos, pues se le mostró como si hubiera sido un mal amigo del cantante. Primero pareció que fue él quien le fue con “el chisme” a Luis Miguel acerca de Mariana Yazbek e Iñárritu. Después se vio una pelea entre ambos en un antro en el que “El Sol” le echa en cara que gracias a él viajó por todo el mundo.
Palazuelos aseguró que las cosas en la serie no se retrataron de la forma en la que fueron y criticó el que Luis Miguel lo haya mostrado así.
-La nacionalidad de Luis Miguel
Otro tema que causó impacto ya hacia el final de la serie de Netflix fue el recordar que Luis Miguel no es mexicano, que en realidad nació en Puerto Rico y que fue su padre no sólo quien mintió al asegurar que nació en Veracruz, sino que años después, ya distanciado de él, filtró la información a los medios de comunicación.