En los años 90 la industria de la moda cambió cuando surgió el término “supermodelo”: figuras destacadas de las pasarelas que comenzaron a brillar más que las marcas que vestían. Fue en esa lista en la que resaltaron nombres como el de Naomi Campbell, Cindy Crawford, Linda Evangelista y Christy Turlington.
La propia Cindy Crawford lo recuerda hoy a sus 57 años, en el primer episodio de la serie documental Supermodelos: “éramos las representaciones físicas del poder, actuábamos como mujeres fuertes y cuando nos mirábamos al espejo empezamos a creérnoslo”.
Pero hacer una retrospectiva a sus carreras, ya en ascenso desde los años 80, a través de este show, implicaba más que sólo retratar sus momentos más altos.
Plasmar las exigencias a las que estaban sometidas, así como sus luchas personales, sus imperfecciones y el hecho de que al final del día siguen siendo seres humanos, era un mensaje importante para transmitir en el show de Apple Tv+, explica la productora del programa, Sara Bernstein.
El escrutinio público al que estaban sometidas, señala, fue de las complicaciones más fuertes a las que se enfrentaron.
“Emergieron en un momento muy diferente al que vivimos hoy, así que hay un tipo de energía nostálgica y fascinación al volver a visitar esos primeros días donde las redes sociales no estaban presentes, apenas teníamos teléfonos y no vivíamos la vida en línea.
“Eran modelos emergentes en ese entonces y no podían controlar su imagen de la forma en la que lo hacen ahora”, dice.
Sin embargo, Bernstein considera que con las redes sociales hoy ese escrutinio es más preocupante en la industria, pues a pesar de los avances en cuestión de estereotipos, ahora además de una herramienta de publicidad, son una exigencia para que las modelos mantengan cierta imagen.
“Hay una percepción mucho más evolucionada de lo que es la belleza y sobre todo lo que puede ser hermoso; los tipos de modelos y campañas de las marcas y los diseñadores realmente están adoptando esta nueva visión y es más inclusivo que nunca, es un cambio realmente positivo”, acepta.
“Pero a diferencia de aquellos tiempos, aunque parecía que sus vidas estaban bajo un microscopio, no era como es hoy, ciertamente fueron perseguidas y examinadas, pero todavía había un límite o separación de tener que exponerse las 24 horas del día. Ser una supermodelo hoy debe tener una presión increíble para controlar y mantener esa imagen en todo momento”.
Racismo, envejecimiento y otras luchas personales son las que se tocan a lo largo de esta serie de cuatro episodios en la que cada una de las modelos rememora, a partir de una entrevista, los primeros días de sus carreras.
Linda Evangelista, quien a inicios de septiembre reveló que se enfrentó al cáncer en dos ocasiones, también habla de esto en la nueva producción que llega a la plataforma mañana.
“Eso sale en la serie y creo que es valiente que todas las mujeres hablen sobre lo que es importante para ellas, lo que es significativo en su vida. Queríamos plasmar esa adversidad que ha enfrentado cada una de ellas en sus propias vidas y carreras”, dice Sara.
El reencuentro comenzó con una propuesta por parte de la producción a Naomi Campbell y Cindy Crawford, quienes pusieron como condición que sus dos amigas estuvieran también.
“En este momento las cuatro se encuentran en diferentes etapas de sus vidas, diferentes puntos de sus carreras como mujeres de 50 años que están envejeciendo y quieren demostrar que está bien, siguen siendo increíblemente hermosas por dentro y por fuera. Creo que hay mucho que aprender sobre cómo se hace eso con gracia. Es una historia de empoderamiento femenino”.