
La primera vez que Dalú se interesó por la música fue cuando tenía 13 años, o un poco menos. En ese tiempo le dijo a su papá que quería dedicarse a esto, pero él —que es un productor de videos musicales— no la motivó mucho, argumentando que había demasiadas chavas que cantaban bonito.
Ella siguió en secreto con ese gusto, no sólo cantando, sino componiendo canciones. Años después, su papá escuchó una canción y le preguntó de quién era, a lo que Dalú contestó que era una composición suya.
“A partir de allí me hizo mostrarle todas las canciones que yo había hecho desde puberta, me preguntó que por qué no se las había enseñado y yo le contesté que me daba pena. Él me dijo: ‘es que ya eres cantautora y eso marca la diferencia’”.
Desde entonces su papá ha apoyado totalmente su carrera y se ha convertido en el hombre clave de su desarrollo.
Dalú se dio a conocer en la última edición de La academia, en Azteca. Ahora, dice, está cumpliendo uno de sus deseos, que es que esas letras que ha compuesto desde hace tanto tiempo estén en manos de diversos artistas que ella admira para que pronto suenen en sus voces.
“Les mandé canciones a algunos exacadémicos y también a otros artistas e incluso cantautores porque yo no quiero que mis temas se queden nada más en mi cabeza”, dijo.
El fin de semana Dalú lanzó el video oficial de una de las canciones que marcaron su paso por La academia, “Mejor sola”. La canción la compuso dentro de su estancia en la casa, en un momento en el que vivía un idilio con Carlos Torres.
“Creo que muchas chicas y chicos pasan por ese tipo de cosas, de estar en relaciones que no van a ningún lado y que no tienen las agallas para valorarse”.
Además de este tema, lanzó previamente “Inquebrantable”, que hace referencia a lo que ella vive en medio del ojo público.
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